La crecida del río Algar obliga a suspender la ruta ciclista Altea-Pantano de Guadalest

La fuerte crecida del río Algar tras el intenso episodio de lluvias vivido el pasado mes de marzo y que sigue sin abandonar por completo la Comunitat Valenciana ha obligado a suspender la tercera edición de la Ruta Altea-Pantano de Guadalest para bicicletas de montaña que estaba prevista para el próximo día 8 de mayo.

Tal y como ha explicado el concejal de Deportes de la Villa Blanca, Pere Barber, el caudal actual del río impide el tránsito por el recorrido habitual de la prueba ciclista, por lo que se ha optado a posponer su celebración a una fecha todavía por concretar, pero que será, en todo caso, después del verano.

Según ha explicado el responsable municipal de Deportes, “las lluvias caídas en las últimas semanas han provocado una crecida del río que hace inviable que se pueda desarrollar con normalidad esta ruta ciclista”.

Como ha recordado Pere Barber, “era una actividad gratuita para los participantes y no hacía falta inscribirse en la misma con anterioridad al día de su realización, por lo que la gestión de su aplazamiento ha sido relativamente fácil”.

“Lo lamentamos porque había mucha gente ilusionada en participar esta próxima semana en la Ruta y el aplazamiento de este tipo de actividades deportivas y de ocio en las que suelen participar familias y grupos de amigos suponen un cambio de planes para muchos”; ha matizado el concejal.

Cabe recordar que río arriba, en la localidad de Bolulla, se han producido, y también con la crecida del río como triste protagonista, dos accidentes con final trágico durante las últimas semanas y que les han costado la vida a tres personas.

El primero de ellos tuvo lugar el día 8 de abril cuando dos personas, uno de ellos el guía de la excursión, fueron arrastradas por las aguas y nada pudieron hacer los equipos de rescate por salvarles la vida. Sólo diez días más tarde, un joven de 24 años, también en el paraje del Estret de les Peñes, saltó al agua y esta acabó por arrastrarlo río abajo donde finalmente fue encontrado su cadáver.

Tras esos dos luctuosos sucesos, el alcalde de Bolulla, Adrián Martínez, anunció que pediría una reunión a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para estudiar medidas que pudieran poner fin a este tipo de situaciones.

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