La incertidumbre y el miedo paralizan las ventas en el sector inmobiliario de Dénia

La actividad de las inmobiliarias ha frenado en seco con la crisis sanitaria. La incertidumbre y el miedo ha paralizado las ventas en el sector. César Roa, presidente de la asociación de inmobiliarias Dénia MLS, destaca que la facturación en las últimas semanas en obra nueva y segunda mano "es cero".

Roa explica que algunas inmobiliarias tenían clientes que iban a comprar, pero que han decidido cancelar. La "gran mayoría" de esas cancelaciones corresponden a extranjeros, matiza, porque "el mercado internacional es más precavido". Otras personas que tenían previsto firmar las escrituras estos días han optado por aplazar ese paso hasta el mes de junio. También hay quienes quieren sacar provecho de la actual situación y están a la espera de que bajen los precios para encontrar, añade el presidente de la asociación.

Desde el decreto del estado de alarma, las empresas que forman parte de Dénia MLS han cerrado sus puertas al público y hace teletrabajo. Esperaban que ahora que la población tiene que quedarse en casa y navega más por internet alguno se animara a buscar vivienda o, al menos, a pedir información. Pero no ha sido así y no han recibido ninguna solicitud.

En opinión de César Roa, este revés supone "un desastre para el sector" y hasta que no vuelva a rodar después del estado de alarma, "no sabremos el alcance real" de las pérdidas que ha supuesto la crisis sanitaria en la actividad inmobiliaria. Reconoce que se aventura una situación complicada para las familias, que puede llegar a ser "desesperante".

En ese sentido, hace hincapié en que hay que ver cómo termina el tema de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). Teme que se produzcan bastantes recortes en empleados en las empresas de todos los sectores cuando finalice la crisis. Entonces los ciudadanos no estarán para pensar en comprarse una casa, ni de segunda residencia y de vivienda principal.

En caso de que se cumplan los peores augurios, continuará la paralización en las ventas. Eso abocará a algunas oficinas al cierre, lamenta.