Las protectoras de animales están bajo mínimos debido a la merma de ingresos por la pandemia

Las repercusiones de la pandemia se están dejando notar y con fuerza en las protectoras de animales, que han visto mermar sus ingresos de forma notable y se están quedando bajo mínimos. Antes podían contar con aportaciones y eventos solidarios que les ayudaban a sufragar los gastos de alimentación y veterinarios. Ahora tienen que seguir haciendo frente a las facturas pero sin el colchón económico que aportaban diversas iniciativas.

La Asociación Protectora de Animales de Dénia (APAD) ha dejado de recaudar más de 5.000 euros desde que comenzó la crisis sanitaria y el confinamiento. Según comentan desde el colectivo, el primer domingo de abril tenían previsto hacer una fiesta benéfica. Suelen hacer un par al año con barbacoa y rifas para poder recaudar fondos. En ellas suelen llegar a conseguir cerca de 3.500 euros. Sin embargo, la iniciativa se tuvo que anular.

A eso hay que añadirle que ahora han descendido en picado las donaciones y transferencias de particulares y que ya no se pueden hacer recolectas económicas o de alimentos en los supermercados. Y, además, contaban con ingresos regulares de unos 500 o 600 euros mensuales procedentes de una tienda de segunda mano que tienen en Xaló, pero que por la crisis sanitaria también ha tenido que cerrar sus puertas hasta que acabe el estado de alarma.

Desde APAD insisten en que intentan arreglarse con lo poco que pueden conseguir, pero "si esto dura mucho no podemos encontrar en una situación más complicada". En estos momentos en sus instalaciones hay alrededor de 70 perros, aunque han llegado a superar los 150 en otras épocas. Además de contar con menos recursos económicos, con el confinamiento disponen de menos personal voluntario.

Durante este periodo las adopciones han bajado. Y temen que una vez se permita de nuevo la libertad de movimientos se pueda producir algún abandono. Estos días se están utilizando a los canes como excusa para salir a la calle y modifican sus hábitos. Después los perros querrán mantener esa rutina, y al no conseguirlo quizás "destrocen cosas " y algunas personas puede que acaben deshaciéndose de ellos.

En Apasa, la protectora de animales de Xàbia, cruzan los dedos porque por ahora están aguantando. "Pero no sé cómo irá en un mes", admite su presidenta, Amanda Conway. Quizás entonces tengan que hacer algún llamamiento a la población para obtener productos de alimentación. En las instalaciones tienen 135 perros. Las actividades se han cancelado y "desconocemos si podremos hacer alguna en junio o en julio", añade.

RAMA (Rescate Animal Marina Alta) ha puesto en marcha a través de redes sociales una rifa solidaria con papeletas virtuales para tratar de obtener algún ingreso pues, según reconoce, "estamos en las últimas". El motivo es que los eventos tradicionales se han cancelado por culpa de la crisis sanitaria, pero la asociación debe seguir pagando la residencia de los animales y también hacer frente a las facturas veterinarias.

La Associació animalista Els Poets de Pedreguer es otro de los colectivos que, a pesar de los pocos ingresos que consiguen estos días, no han parado su actividad, tanto en el refugio de gatos como en las casas de acogida donde están los perros y los mininos. Sus voluntarios acuden a darles de comer porque "tenemos que seguir atendiendo a los peluditos". La crisis sanitaria les ha pillado cuando proyectan hacer una protectora en el municipio con capacidad para unos 60 animales. Llevan un año tramitando papeles y preparándolo todo. Cuenta con el lugar, pero hay que adecuarlo a las normativas actuales y eso requiere de un presupuesto que ronda los 30.000 euros.

El proyecto está ahora "paralizado" por culpa de la pandemia. Querían empezar una campaña para recaudar fondos. Iban a llamar a las puertas de las grandes empresas de Pedreguer en busca de una parte de la financiación. Y la otra, con colaboraciones de particulares. Saben que en la actual situación va a resultar más complicado reunir el dinero y tardarán más, pero no se rendirán.