«Si no es por él, me muero achicharrado»

Tenía muchas ganas de volver a verle después de lo que hizo por él. Álex, un vecino de Dénia, se reencontró ayer con su «héroe» particular, Gorgui Lamine Sow, un vendedor ambulante senegalés sin papeles que protagonizó una valiente gesta. Este joven de 20 años no dudó el pasado viernes en trepar hasta un balcón de una casa en llamas y sacar al vecino que estaba dentro y no podía salir. Este hombre quería darle las gracias por su extraordinario gesto hacia alguien que ni siquiera conocía. «Si no es por él, me muero achicharrado», recalcó en varias ocasiones a pocos metros de la calle del Port, donde unos días antes ardió su vivienda.

En silla de ruedas porque tiene dificultades para caminar y con heridas en la mano, una oreja y la nariz, Álex abrazó a ese valiente que evitó que él y que su perro Lucky se quemaran. Incluso bromeó con lo sucedido diciéndole: «Parecía más negro que tú». Y para demostrarle su agradecimiento y lo que opinaba de él, obsequió a Gorgui Lamine con un pequeño regalo, una camiseta con el emblema de Superman, y otra más para la hija de siete meses de su salvador.

El vecino de Dénia relató que cuando se percató de las llamas intentó salir, pero ya se estaba quemando. Golpeó la persiana del balcón aunque sin fuerzas suficientes para conseguir abrirla. Entonces, cuando ya lo daba todo por perdido, apareció Gorgui rompiendo esa persiana después de haberse encaramado por la fachada hasta el primer piso, donde estaba Álex. «Me cogió como si fuera un saco de algarrobas y me sacó», explicó.

Según dijo tenía muchas ganas de conocer a su héroe porque en su primer encuentro no pudo darle las gracias debido a lo mal que se encontraba. Para este vecino del número 7 de la calle del Port, la actitud de Gorgui, que no se preocupó por el peligro que suponía subir a por él, era muy loable. Según recalcó, teniendo alrededor gente conocida, la que decidió ir a ayudarle fue un completo desconocido. «Todos deberíamos ser como él», apuntó. Y aprovechó para decir que este senegalés «se merece los papeles porque se arriesgó por salvarme».

También el joven contó cómo vivió él lo sucedido. Gorgui Lamine es un vendedor ambulante de productos de artesanía que vive en Gandia y ese viernes, poco después del mediodía, regresaba de la zona de la explanada dianense cuando el fuego en una vivienda le llamó la atención. Al ver que alguien necesitaba ayuda en el interior, en la parte del primer piso, se ofreció «voluntario» y se encaramó por una puerta de reja para subir y ayudar a Álex, de 39 años y con dificultades para andar, que no podía salir.

«No entré rápido, le dije que me diera la mano porque podía haber una bombona de butano y explotar», narró. Cuando el inquilino le contestó que no se podía levantar, Gorgui Lamine accedió al interior y cargó al hombre a sus espaldas. Luego volvió a salir por el balcón y desde allí bajó con ayuda de una escalera que habían acercado unos vecinos.

Este valiente admitió que «tenía un poco de miedo» porque sabía lo que dolían las quemaduras por fuego. «No tengo dinero, soy pobre, lo he hecho de corazón», insistió una y otra vez. Una vez rescató a Álex y a su perro, se lavó las manos en casa de unos vecinos y se dirigió a la estación de autobuses para regresar a Gandia. Una vez allí, no le contó nada a novia en un principio, pero poco a poco su gesta se fue difundiendo por las redes sociales y al final se descubrió la identidad de este héroe.

Ante esta actuación, el Ayuntamiento de Dénia ha remitido una solicitud a la Subdelegación del Gobierno en Alicante para poner en su conocimiento estos hechos y para pedir que, a raíz de esta acción, estudie la posibilidad de regularizar la situación de Gorgui Lamine Sow, de su pareja y de su hija al considerar que «concurre una situación extraordinaria de colaboración policial o interés público». Así lo confirmó ayer el concejal de Protección Ciudadana, Javier Scotto. El edil también indicó que están barajando entregarle una felicitación por su acto durante la celebración del Día de la Policía Local, que tendrá lugar el 20 de diciembre, y en el que se conceden reconocimientos y medallas a los agentes por sus años de servicio y por su acciones destacadas. Este joven senegalés podría convertirse en el protagonista de ese evento.

Gorgui llegó en agosto de 2017 a España desde Argentina. Ha estado en Barcelona y Madrid, pero ahora vive en Gandia con su novia, Gana, y su hija de siete meses. De momento está empadronado en la capital de la Safor, pero quiere cambiar a Madrid. Cada día coge el autobús para ir a Dénia a vender productos de artesanía, donde puede hacer más negocio.