La Fórmula 1 ya está en Madrid

Sí, he dicho éxito, porque la carrera de Valencia lo fue, y durante cinco años albergamos un Gran Premio que, junto a la Copa América, nos puso en el mapa internacional.

Eso escoció mucho, a los políticos de la oposición de aquí, que lo usaron como arma electoral arrojadiza, y a los de fuera, que no veían con buenos ojos el vuelo internacional que tomó nuestra ciudad, que quieren que permanezca lo más ‘cerradita’ posible. Si no viene nadie a vernos, a conocernos y a disfrutar de lo nuestro, a invertir, a hacer hoteles y empresas y a dejar por aquí algo de riqueza, todavía mejor, y si no miren el ‘run-run’ con el que ya quieren imponer el sentir de que en Fallas ‘viene mucha gente’ ¡novedad oiga!

Al caso: las corruptelas de otros casos de mangoneo flagrante, mancharon la imagen de una Fórmula 1 que, como Calatrava o el aeropuerto de Castellón, fueron arma política, pero en lo deportivo, espectáculo e imagen, la Fórmula 1 fue un éxito, y estaba destinada a ser el gran premio único en España ante las reticencias de Barcelona a pagar el canon.

Estas reticencias siguen en la ciudad condal, y Liberty Media ya negocia con la capital dónde, cuándo y cuánto costará el gran premio. Los madrileños aplaudirán a rabiar lo suyo, como hacen siempre, nadie criticó los gastos para unas Olimpiadas que nunca tuvieron, y todo apunta a que la F1, la de verdad, llegará a Madrid. Entretanto dirán que la de aquí fue un fracaso, pero es mentira. Se perdió el relato, pero la F1 fue un auténtico éxito en imagen.