Citroën sigue innovando y subiendo de nivel con sus últimas incorporaciones a su gama de vehículos. El C5 X es uno de los últimos modelos de la marca francesa en llegar al mercado, y uno de los más atractivos, todo sea dicho. Y es que este Citroën tiene muchos argumentos positivos en todos sus costados, empezando por el diseño. En el exterior nos encontramos con unas líneas muy modernas, en consonancia con las últimas llegadas de la marca, donde destaca en el frontal una amplia parrilla y unos deportivos faros led cuyas líneas se unen a la silueta del chevrón superior del logo de Citroën. Su longitud es de 4,81 metros y podríamos decir que combina los rasgos de una berlina y un SUV. Si nos movemos hasta la trasera encontramos, además, una atractiva caída con dos alerones traseros, un concepto arriesgado pero que, en esta ocasión, le ha quedado realmente bien al C5 X.
En el interior el protagonista es el espacio y la comodidad para viajar. No solo el confort de los asientos es excelente, sino que también cuentan con funciones de calefacción, ventilación y masaje, por lo que hacer muchas horas de viaje con este modelo es pan comido, y no solo por estos elementos, también gracias a unas suspensiones que recogen muy bien todas las irregularidades del terreno.
En el plano tecnológico y de conectividad tampoco se queda atrás. En el habitáculo nos encontramos con dos pantallas: un cuadro de instrumentos digital de siete pulgadas y una pantalla central que puede ser de diez o doce pulgadas. Además, si lo seleccionamos en nuestro equipamiento, también podemos tener un 'head-up display' tras el volante, así como un sistema de control por voz de fácil uso.
Doble pantalla, muchos espacios para dejar objetos y controles del climatizador manuales.
También tenemos muchos espacios para dejar objetos y un puesto de carga inalámbrica para el teléfono móvil. Aun así, a pesar de toda esta tecnología, los controles del climatizador siguen siendo por botones y no táctiles a través de una pantalla, algo que se agradece. Con todo esto que hemos comentado no podíamos dejar de hablar del maletero, cuyas cotas varían según la versión: en las variantes de gasolina el volumen que ofrece el C5 X es de 545, mientras que en las versiones híbridas enchufables esta cifra se reduce hasta los 485 litros debido a una menor altura respecto al modelo puramente de combustión.
Eficiencia y ahorro
Con el motor gasolina podemos encontrar una buena eficiencia y con las versiones híbridas enchufables un positivo ahorro en nuestro día a día al volante. El gasolina de 130 CV es un propulsor de 1.2 litros muy bien acabado asociado a un cambio automático de ocho velocidades, que nos puede llegar a dar unas cifras de consumo de unos seis litros a los cien. En el caso de los modelos con etiqueta cero, podemos encontrar dos versiones: de 180 o 225 CV. En estas dos versiones la autonomía homologada es de 63 kilómetros, una cifra que en la mayoría de los casos puede ser más que suficiente para conducir en modo cien por cien eléctrico en nuestro día a día. De hecho, si tenemos un cargador en el garaje, la carga de su batería de 12,4 kilovatios-hora con un enchufe doméstico se puede llevar a cabo en siete horas, por lo que podemos cargarlo cómodamente durante la noche. Eso sí, si llevamos a bordo el cargador de 7,4 kilovatios –corriente alterna– la carga puede completarse en una hora y 40 minutos.
El Citroën C5 X está a la venta desde 33.600 euros para el modelo gasolina, mientras que las versiones híbridas enchufables están a la venta a partir de los 44.200 euros.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.