¿Generación digital o venta tradicional?

La pandemia está digitalizando la sociedad a marchas forzadas. Cuando lean estas líneas, algo parecido a un 'toque de queda' término militar que sólo concíamos por los teledirios, se habrá impuesto en la mayoría de España. La crisis sanitaria nos está llevando a que solo podamos salir de casa para trabajar, pasando el resto del tiempo en casa, si es posible, consumiendo 'on-line'.

Este apego porque solo trabajemos y consumamos, sin hacer vida social, está llevando a todo tipo de empresas a digitalizar sus ventas. También a las marcas de coches, empeñadas en muchos casos en que su red comercial atienda a los compradores por videollamada aunque ellos –ni clientes ni empresarios– lo pidan.

Se busca así que el comprador no vaya al concesionario, que resuelva y compre 'online'y enviarle el coche a la puerta de su casa «podemos mandar incluso un coche de pruebas a casa del cliente» nos dedía el director general de Jaguar y Land Rover en un reciente almuerzo, digital por supuesto. Este sistema de compra llevaría con el tiempo a la desaparición del vendedor y del punto de venta tradicional. Por videollamada nos pueden atender desde cualquier sitio... del mundo, mostrarnos los coches de forma on-line con numerosos videos y configuraciones y perder el contacto 'real' con el coche y con el vendedor. En 2021 varias marcas empezarán a vender sus coches on-line, contando con los concesionarios, si acaso, solo para la entrega final, y si tenemos en cuenta que los coches eléctricos apenas tendrán postventa y que muchos concesionarios son filiales a la orden de las marcas, el futuro es gris.

Nuestro consejo es que, tomando las medidas de seguridad oportunas, vayan al concesionario, miles de empresas y empleos están en juego.