Probamos el Audi e-tron Sportback S: Un eléctrico diferente a los demás

audi e-tron sportback s ·
Mientras todas las marcas se afanan por conseguir la máxima autonomía y eficiencia, Audi apuesta por un SUV eléctrico aún más deportivo para cautivar a los clientes 'eco'

Alex Adalid

Valencia

Lunes, 17 de enero 2022, 12:54

Batería, autonomía, potencia de recarga, precio, coste de uso… Todos estos factores y muchos más entran en juego cuando se trata de comprar un coche eléctrico pero ¿tiene que ser siempre así? ¿Nos preocupamos por el consumo cuando compramos un deportivo? ¿Y si este deportivo es eléctrico?

Estas preguntas se las deben haber hecho también en Audi a la hora de lanzar la versión S del e-tron Sportback. Es más potente, con 503 CV y más deportivo y más veloz que el ya rapidísimo Sportback, pero su autonomía es menor y se reduce hasta los 365 kilómetros, un dato bajo para un eléctrico premium de hoy en día, pero no para un coche deportivo, y este es el punto al que queremos llegar: el Audi E-tron Sportback S no está pensado para dar su mayor rendimiento en autonomía, sino en prestaciones y placer de conducción, y vamos a ver si lo consigue.

Acento valenciano

El diseño es una de las claves de este coche, lo firma el valenciano Juan Carlos Huerta, formado en el máster de diseño de la Universidad Politécnica de Valencia. Para Audi ya había dibujado tanto la versión 'normal' del E-tron como otros modelos de la marca alemana. Lo cierto es que es el modelo más atractivo de su clase, y si otras marcas han buscado una diferenciación extrema entre sus coches eléctricos y los convencionales, Audi ha logrado un estilo propio para sus 'e-tron' sin perder la esencia de la marca. En el caso del Sportback, la trasera tipo coupé significa un techo más bajo y una zaga de gran atractivo, sin perder espacio en las cinco plazas –un poco en altura de las plazas traseras, aún holgada– y con un maletero con 615 litros frente a los 660 del E-tron con carrocería 'normal' que también se ofrece con esta mecánica.

Espectacular interior de altísima calidad, como siempre en Audi.

Diferentes opciones

Con estas dos carrocerías: normal y Sportback, el E-tron se vende con batería de 75 kilovatios y 313 CV, y de 95 kilovatios con 408 CV o con estos nada menos que 503 CV que tiene la versión S. Se consiguen añadiendo un motor más en el eje trasero, de modo que tiene tres motores. En el eje trasero cada motor dirige una rueda, y así se puede dar direccionalidad impulsando más a una que a la otra en los giros, logrando una velocidad de paso por curva todavía mayor. Las prestaciones son 'atómicas', y el Sportback S alcanza los cien kilómetros por hora en 4,6 segundos y, si siguiéramos acelerando, llegaría a los 210 por hora, donde se limita automáticamente la velocidad.

Todo ello, como buen deportivo, repercute en el consumo, con una homologación de 26,6 kilovatios cada cien kilómetros que hace que su batería de 95 kilovatios homologue 365 kilómetros de autonomía. En uso real esto significa que tenemos entre 250 y 320 kilómetros de rango de uso antes de volver a recargar, y aquí es donde llega la principal pega –en España– de este coche: no hay puntos de alta potencia, y menos aún en carretera, lo que nos obligaría a para cada unos 200 kilómetros durante, siendo realistas, unos 45 minutos para seguir con carga adecuada.

Lo comprobamos en nuestro viaje a Valencia. El coche invita a ir deprisa y aprovechar parte de sus prestaciones –no todas, que son una locura–, y por tanto llegamos al área 175, donde están ubicados los cargadores de Tesla –de 150 kilovatios de potencia– y los públicos –de solo 50 kw–, y empezamos a cargar. 45 minutos después y con 280 kilómetros de autonomía emprendemos el camino restante hacia Valencia –170 kilómetros– para llegar a la ciudad con unos 80 de autonomía, algo agobiantes en un coche de gasolina, pero no en un eléctrico.

Máxima tecnología, como con estos espejos retrovisores digitales.

Cómodo también en ciudad

En los trayectos durante la semana en ciudad y alrededores es cuando más disfrutamos. Visitamos la Universidad Politécnica, donde el coche fue uno de los protagonistas del inicio de la XX Edición del Máster de Diseño que estudian los futuros diseñadores de coches, y también realizamos trayectos en diferentes zonas de curvas. Ahí nos damos cuenta del sentido de este SUV: un deportivo para el día a día con capacidad familiar y con cero emisiones. Y cuando decimos deportivo, lo decimos con todas sus letras: corre, se agarra, frena y gira de forma exageradamente buena, y permite ir muy muy rápido, aunque el gasto de electricidad sea disparatado… algo que tampoco debe importarnos siempre que no viajemos muy lejos.

Todo ello con una tecnología que incluye, en nuestra unidad, los famosos retrovisores digitales con pantalla, a los que hay que cogerles el truco, pero son muy engorrosos si tenemos otro coche en la casa con retrovisores convencionales. Por doce mil euros es una opción que no sabemos si realmente vale la pena.

Veredicto: un buen deportivo

El e-tron S es un excelente SUV deportivo siempre que tengamos, al menos en España, otro coche para largos viajes sin problemas de repostajes, como puede ser un Audi Q8 diésel. El e-tron se convierte así en un excelente deportivo de uso diario, con capacidad familiar y con etiqueta cero para evitar cualquier restricción. Aunque tiene un precio alto desde 100.000 euros, no lo es tanto si pensamos en lo que cuesta un deportivo con esta prestaciones y capacidad familiar. Un Audi SQ8 sale por 125.000 euros, y el RSQ8 por 163.000 euros. Los dos son más polivalentes hoy, pero no sabemos si tanto dentro de unos años, cuando las recargas rápidas sean la norma y, en las grandes ciudades, solo se entren con coches 'eco' serán tan adecuados.