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Pocas horas después de hablar con él para preparar un congreso sobre Maritain y la Europa social, me avisan que fallecía Eugenio Nasarre el pasado sábado 27 de enero. Esa mañana, cuando llegó su esposa Maxi se lo encontró sin vida en la mesa de ... trabajo. Aún sorprendido por su inesperada muerte, me gustaría recordarle con agradecimiento por un legado político sereno, apasionante e imprescindible. No sólo para entenderle a él, sino para entender a la joven generación que, tras sentar las bases de la Constitución de 1978, promovieron la cultura de la concordia, la amistad cívica, el derecho a la vida y la libertad de educación.

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lasprovincias El legado político de Eugenio Nasarre