La Inteligencia Artificial aplicada al cribado de mama: mejoras para profesionales y pacientes
Alfonso Martínez Cal. General Manager Iberia de Incepto
Martes, 3 de octubre 2023, 18:36
Secciones
Servicios
Destacamos
Alfonso Martínez Cal. General Manager Iberia de Incepto
Martes, 3 de octubre 2023, 18:36
Lo voy a decir con rotundidad porque nos hace muy felices haberlo conseguido: somos capaces de detectar el cáncer de mama mediante inteligencia artificial obteniendo ... importantes mejoras en el diagnóstico. Y lo hacemos sin perder de vista el componente humano. O, más bien, al contrario: poniendo todo el foco en el componente humano. En Incepto, sentimos cada nueva solución médica como un éxito colectivo que beneficia al sector, al paciente y al profesional médico. Presentar la solución Transpara, un algoritmo de IA para el screening de mama, de nuestro socio Screenpoint, en Valencia, en un foro científico tan relevante como el congreso anual de EUSOBI, es solo el comienzo de todo el camino que nos queda por recorrer en España.
Estamos convencidos del potencial transformador de la inteligencia artificial aplicada al cribado de mamografías. Basta leer el estudio MASAI (Mammography Screening with AI) publicado en The Lancet, llevado a cabo con Transpara. Dos cifras en concreto son las que empujan el progreso del sector. Por una parte, la IA mejora la detección de cáncer de mama en un 20% frente al cribado tradicional. Por otro lado, la productividad del personal médico se incrementa hasta en un 44% y permite eliminar la segunda lectura.
Con estos datos, ante una posible a la enfermedad, qué preferiría el paciente: ¿ser diagnosticado solo por un profesional? ¿O que ese médico cuente con la ayuda de un algoritmo de IA? No se trata de sustituir al ser humano, sino de brindarle una herramienta de apoyo. No queremos desposeer de piernas al escalador, sino dotarle de bastón, piolet y mosquetones con tal de incrementar su seguridad. El profesional sanitario recibe un diagnóstico inicial sobre el que trabajar. En otras palabras, permitimos que la materia gris se enfoque en lo realmente importante. El logro es que los médicos sean más eficaces, a la par que aumenta la eficiencia de los centros de salud.
Hemos encontrado que el sesgo humano, lo que en la sabana nos ayudaba a sobrevivir, tiene una desafortunada contraparte en el mundo moderno. Si entre la maleza veíamos asomar un enorme león, de pronto toda nuestra atención se concentraba en escapar del depredador. No nos detenemos a otear si más lejos hay otro peligro. Priorizamos lo inmediato frente a lo lejano, lo mayor sobre lo menor. Y en el cribado de mamografías, eso implica que ante varios focos perdamos de vista las lesiones más pequeñas, las amenazas menos evidentes.
Del mismo modo, somos conscientes de que la atención de un profesional de salud, por excelente que sea, no es la misma a primera hora de su jornada que al final. A todos nos pasa. El cansancio se acumula y merma el rendimiento. Por eso destaca el futbolista que en el último minuto arranca a matacaballo y encara el área rival. Es infrecuente. Lo normal es esperar el cambio tras efectuar tres o cuatro galopadas a quince minutos de que acabe el partido.
Para enfrentar el reto de la atención decreciente, el algoritmo de Transpara ordena los casos en función de su gravedad. La urgencia frente la emergencia, atender primero la prioridad. Así, el médico revisa las lesiones más importantes y el paciente recibe pronto tratamiento. Todos ganan en esta carrera contra reloj. Recordemos que la tasa de error en el diagnóstico radiológico ronda el 4%. Es decir, una de cada veinticinco personas recibirá un análisis equivocado ¿No es magnífico que podamos ofrecer una mejora real para esas personas?
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Destacados
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.