Los Rubiales

La familia, ese ente intocable, nido de traumas, de amor y rencor. Pozo de felicidad y falta de libertad. Este verano para el recuerdo asistimos a la máxima expresión de su lado más visceral en los telediarios y programas del corazón. Ya sabemos que en ... la época estival hay poca noticia que rascar. Con la canícula llega la explotación de la información más sensacionalista para rellenar la parrilla, estirando cualquier nimia propuesta. El culebrón está garantizado con el protagonismo de algún clan familiar disfuncional. Los lazos afectivos envuelven regalos envenenados. El estío nos ha traído un par de sainetes que han derivado en tragedia griega. Un descuartizador con buena planta y pocas luces y un dirigente de una poderosa organización que recuerda a Lex Luthor. Sorprendentemente, el segundo ha empañado la triste hazaña del primero. El nieto de Curro Jiménez, un asesino confeso con pedigrí en Instagram, ha sido eclipsado por un individuo que lo tenía todo y quizás se quede sin nada por comportarse como un gañán.