Secciones
Servicios
Destacamos
Como en botica, hay de todo en todas partes: muy bueno, bueno, menos bueno, malo y lo peor. ¿Hay más jetas en la vida política ... que fuera de ella? Supongo que andarán por igual, pero como el número de elementos políticos es menor que el del resto de colectivos, debe ser que si lo valoramos en porcentaje de jetas es muchísimo mayor en el plano político por goleada. Volvemos a enfrentar de nuevo lo privado frente a lo público, el empresario que se juega su patrimonio frente al político que gestiona la pólvora del Rey. El primero, ha llegado a su posición a base de arriesgar su dinero y aprender tras sufrir no pocas derrotas. El segundo, es carne del oportunismo y un animal experto en la adaptación del medio y las circunstancias del momento.
Esta semana se habla de los grandes resultados y las reflexiones, bastante certeras todas ellas, de Juan Roig líder de Mercadona, respecto a las cifras generadas por su empresa en este último año. Ejemplo de quien se juega su pasta y además la retorna a la sociedad cuando la cuenta de resultados es satisfactoria. En el otro extremo, esta misma semana, encontramos al que ha sido portavoz de Vox en el ayuntamiento de Valencia, Juan Manuel Badenas, ya que lo han apartado como portavoz del grupo tras descubrirse la posible trama en la que parece estar involucrado en un supuesto amaño de un contrato para otorgarlo a la empresa que trabaja el marido de la delegada del gobierno. Ahí es nada. Todo es posible con este señor que salió a hacer campaña con un martillo pilón.
Me da cierta vergüenza compartir en la misma línea de esta columna los apellidos de Roig y Badenas, pero son los ejemplos actuales de dos modelos totalmente contrapuestos en nuestra sociedad. Uno es dueño de sus actos, de su dinero y de decisiones como las de ayudar de manera ágil y rápida a mucha gente que sufrió en la dana. De hecho, empresarios como Roig han dado ejemplo de gestión eficaz en los momentos más difíciles.
El otro es un oportunista como tantos otros, al que supuestamente le han pillado con el carrito del helado, como a tantos otros y que dice que sí, que deja el grupo Vox, pero que su culo no se mueve de la silla. Es mejor seguir cobrando tanto él como su pareja, qué casualidad, ambos dos, concejales electos por el partido de Vox. Quieren hacernos creer que se quedan por responsabilidad a los que les votaron, sabedores de que hubieran salido con el mismo resultado si se hubiera presentado como candidato el pato Donald. Y es que cuanto más alto es el sueldo, más jeta hay que echarle al asunto.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Pillado en la A-1 drogado, con un arma y con más de 39.000 euros
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.