Secciones
Servicios
Destacamos
Yo llevo 20 años utilizando el servicio de compra online de Mercadona. Mi primera casa estaba en una cuarta altura sin ascensor -sí, los oligarcas ... fascistas también hemos vivido en fincas sin ascensor- y el supermercado valenciano por excelencia disponía de un robot que cargaba los productos subiendo uno a uno los peldaños. Recuerdo que aquel aparato hacía un ruido como el de Robocop cuando caminaba o sacaba la pistola del compartimento secreto situado en su metálico muslo derecho. Era gracioso. Con los años, pudimos instalar entre todos los vecinos, con gran esfuerzo económico, un elevador. Nuestra calidad de vida mejoró, pero en mi casa mantuvimos la misma costumbre de compra; incluso ahora que ya no vivo en aquella vetusta edificación. Pues bien, el otro día llegó un mensaje a mi móvil de la distribuidora de alimentos notificándome el aumento del precio de este servicio cuyo coste se había mantenido 25 años casi impertérrito. Puedo dar fe de que eso ha sido así durante dos décadas. Ahora será de 8,20 euros, siendo el precio de partida los 7. Y, cómo no, las críticas de los mismos que no se quejan por el incremento exponencial de los impuestos ya han comenzado. A estos les resbala que los hechos impositivos se multipliquen o que los porcentajes de los ya existentes aumenten sin freno. No les escuece que los políticos vivan entre lujos asiáticos y que se regalen palacetes parisinos gracias a las cargas fiscales ineludibles que soportamos los ciudadanos y que rozan ya lo confiscatorio, no. Les fastidia que los empresarios se enriquezcan con unos negocios legítimos a los que los consumidores deciden libremente acudir o no. Pero lo peor es la capacidad del actual Gobierno para manipular los datos macroeconómicos. El socialismo aprendió que admitir los resultados negativos de una mala gestión económica, como hizo Zapatero en la última parte de su nefasto mandato, era un error electoral. Por eso el aparato sanchista se apresuró en colonizar e ideologizar organismos como el Instituto Nacional de Estadística, o en alterar la contabilidad del desempleo con la invención de la figura del «fijo discontinuo». Ahora la macro, proverbial enemiga del PSOE, es su aliada. Es normal, pues, que su parroquia de fanáticos sea incapaz de comprender, por ejemplo, que una subida del 17% de un precio en dos décadas, como el del servicio online de compra de una empresa privada, es infinitamente menor a la subida superior al 50%, ésta responsabilidad de las sucesivas administraciones públicas durante el mismo período, de un producto que afecta directamente al valor final de la mayoría de bienes de consumo, el diésel: de menos de 1 euro el litro en 2005 a 1,5 euros en 2025.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.