Baleargate

Toda gira alrededor del papel moneda de curso legal; o quizás de curso ilegal y por eso la palabra corrupción es como una herida en la cosa publica y conviene actuar con precisión quirúrgica y cauterizar.

Es una cuestión preventiva. Se barajan varias y nada complejas explicaciones al asunto. Hay quien declara que se trataba de «un invento». Sucede siempre que se produce un cambio que nadie da explicaciones concretas del mismo.

¿Qué clase de invento y para que servía el artilugio?

Las sospechas, la oscura conspiración opositora está al acecho y se barajan diferentes opiniones sin prueba alguna.

¿Se trata de esconder algo que se guardaba celosamente en forma de expediente X en el fondo de un cajón semi corrupto con olor a mascarilla pasada de fecha, forma y fondo?

¿Tiene que ver con esa insidiosa noticia que trata de involucrar a la tercera autoridad del país?

Es una noticia que salta con frecuencia a los medios. Se repiten como un eco las dudas o certezas con las que se expresan en los pasillos perdidos del Parlamento nacional.

Ha durado poco esta oficina. Fundada en 2016 para dirimir conflictos de intereses, almacenar declaraciones de bienes e investigar posibles casos de corrupción. ¿Por qué?

Dicen que tratan de evitar la duplicidad y buscan una administración más moderna y eficiente.

La oficina liquidada tenía un régimen de multas para aquellos que no cumplieran con la obligación de entregar la declaración de bienes o filtrar información mientras se investigaba un asunto. Es raro el cierre. ¿No?