El nombre verdadero de las cosas: Sánchez y Bildu

Realmente no hay nada más actual que los clásicos, por eso lo son. No hay nada más actual que la afirmación del gran Salustio de que «hemos perdido el nombre verdadero de las cosas». Lo estamos sufriendo en nuestro país. El PSOE presenta pasado mañana (el 28 de diciembre, en plenas Navidades, para que el turrón y las uvas nos haga olvidar este pacto) una moción de censura contra la alcaldesa de Pamplona, de Unión del Pueblo Navarro (el partido con más concejales en ese Ayuntamiento), para hacer alcalde al candidato de Bildu, la formación heredera de Batasuna. Esa quintaesencia del sanchismo que es Óscar Puente, ministro de Transportes, odiador profesional de la política, defiende con ardor que «Bildu es un partido democrático». Bildu es un partido que lleva en sus listas y pone donde gobierna a condenados por asesinatos y terrorismo, Bildu no condena los atentados de ETA. Bildu participa en homenajes a los asesinos etarras. Pero para Sánchez y los suyos «es un partido democrático». El sanchismo quiere blanquear a Bildu falseando «el nombre verdadero de las cosas» e imponiendo el olvido.

Vendrá un tiempo en el que quienes aprueban o consienten todo esto negarán primero que haya ocurrido y renegarán después vergonzantes del sanchismo. Mientras tanto, Sánchez pacta con prófugos de la justicia, impone la amnistía a favor de los golpistas independentistas contra los demócratas y la Constitución, se alía con el partido de los herederos etarras, intenta asaltar la independencia de la justicia, y rompe el principio de igualdad de los españoles. Lo hace, como cuenta Salustio que dijo Julio César de Catilina, «desde la arrogancia y la crueldad». Y es que dos de las características del sanchismo son la arrogancia y la crueldad. Estos son los nombres verdaderos de las cosas. Pactar con Bildu, el partido que justifica el terrorismo etarra, es una indignidad, una inmoralidad y una indecencia. Pactar con Bildu, el partido que justifica el terrorismo etarra, es escupir sobre la tumba de las víctimas del terrorismo. Pactar con Bildu, el partido que justifica el terrorismo etarra, es una humillación cruel para todos los demócratas. Estos son los nombres verdaderos de las cosas.