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El candidato a la alcaldía de Valencia por Vox y la Ciudad de las Artes y las Ciencias (CACSA) han coincidido en poner a un ... martillo neumático en el centro de sus proyectos de futuro. Microcirugía reconstructiva se llama esta especialidad. JM Badenas difundió un vídeo en el que aparecía luciendo cachas y llevando al hombro un martillo rompedor de los grandes para dar entender lo machote que es y lo poco que va a respetar los bordillos que Grezzi ha sembrado por las calles de la ciudad. Y aún menos sutil era la demoledora fotografía que ilustraba la nota de prensa en la que CACSA informaba de inicio de las obras de conversión del mayor de los hitos construidos por Santiago Calatrava en ese complejo en un «edificio verde» (sic). Negro te pones de ver la estampa que muestra los cascotes y destrozos causados en la cubierta del Museo de las Ciencias con un martillo de estas características cuyo pico aparece en primer plano hendido todavía en los escombros del voladizo. El documento gráfico es, como digo, demoledor. Prueba más que suficiente para que Hispania Nostra, el Colegio de Arquitectos y el Síndico de Agravios solicitaran la paralización inmediata de las obras. A mí, desde luego, me dejó tan perplejo que le escribí a un conocido técnico de esta empresa autonómica: ¿Se puede saber por qué han causado semejante estropicio en el monumento que ha convertido a Valencia en destino turístico, cinematográfico y publicitario internacional? A un familiar mío -añadí- le pusieron placas solares en el tejado del chalet y no le han roto ni una teja. Es que estas placas son distintas -me contestó-. Es un pavimento fotovoltaico. No le dije que me quitaba un peso de encima para no mentirle. Continúo pensando que los mismos que están desautorizando el montaje de huertos solares y no han fomentado adecuadamente el aprovechamiento de terrazas y cubiertas urbanas e industriales van a causar un daño estético irreparable en un conjunto de edificios que si no están protegidos deberían estarlo. Cuando menos para que no modifiquen su imagen a lo bruto, como es el caso, o les pongan pegotes, como los que le pusieron al Palau de la Música, de Gª Paredes, en lugar de velar por su correcto mantenimiento. ¿Es ésta la mejor manera que ha encontrado CACSA, la nunca suficientemente depurada CACSA, de resolver la necesidad que tiene de abaratar la climatización de las instalaciones? ¿Ha sido consultado el autor del edificio? ¿Ha autorizado las obras el mismo alcalde que le ofreció al cardenal Cañizares montar placas solares en aquellas propiedades de la Iglesia cuya colocación no constituyera un atentado contra el patrimonio arquitectónico como este? Dudo que alguna de las posibles respuestas sea afirmativa.

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