Urgente El precio de la bombona de butano para esta semana tras el último cambio de tarifa

Los motivos alegados por la Consejería de Cultura para descartar la compra de una tabla atribuida a Joan Reixach eran razonables. La obra, perteneciente al retablo de los Gozos de María de la cartuja de Porta Coeli, se encuentra en mal estado. La celebración de ... la subasta en Nueva York impedía que la Generalidad ejerciera cómodamente el derecho de tanteo. Y aunque todo apunta a que la pieza superaría la prueba del pato -presenta «los estilemas de la pintura valenciana de mediados del s. XV y las características del obrador de Joan Reixach»-, los técnicos de la casa consideraron que su calidad es más propia del taller que del maestro. Lo que ya no está tan claro es que estos argumentos sean oportunos, coherentes e incontestables. Oportunos, porque en pleno debate mundial sobre la descolonización de los museos Vicente Barrera ha desperdiciado una magnífica ocasión para adelantar al ministro Urtasun por la derecha y rescatar una parte del desarmado retablo de Reixach que se conserva en el San Pío V. Unos pretextos incoherentes porque: A) Tan lejos como el pasado mes de septiembre este mismo consejero quiso ejercer el derecho de adquisición preferente para impedir que el abandonado monasterio de Aigües Vives cayera en manos privadas y ahora se ha negado a rescatar un legado patrimonial bastante más económico y que solo Dios sabe cómo ha llegado a los EE.UU. Y B) Porque, aun siendo cierto que el Estado no posee ningún derecho de prioridad fuera de España, puede pujar por un bien como cualquier particular. Y así lo está haciendo para repatriar cuadros, tapices y esculturas; el más reciente, un retrato de Luis Tristán en Christie's. Anteriormente pujó en Londres por dos bodegones del XVII de Pedro de Camprobín. Y por último, las excusas aportadas eran fácilmente contestables porque muy del montón no será esta 'Adoración de los Magos' habida cuenta que Sotheby's más bien calculó que se vendería por entre 30.000 y 50.000 dólares y se vendió por 91.440. ¿Que está muy baqueteada? Es algo que no discute nadie. Pero para eso está el IVCR+I, que lo nuestro nos cuesta. Y si es por desconchados, peor estaba el 'Salvator Mundi' antes de que lo repristinara un restaurador demasiado creativo para mi modesta opinión y, a pesar de que sólo está atribuido a Leonardo, en 2017 se pagó por él una suma jamás alcanzada por ningún otro cuadro: 450 millones de dólares. No menos digno de comentar es el hecho de que ninguno de los 'maulets' que se mesaron los cabellos cuando el Prado adquirió 'El sátiro', de Fillol, haya abierto ahora la boca. Señal de que no saben distinguir una transacción que revaloriza la firma de un artista de una exportación que tuvo mucho de expolio.

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