Por qué sólo sufrieron tres

Hace ahora justo un año me sentí obligado a empezar la columna advirtiendo al lector de que si insistía en criticar a la CHJ no ... era porque le tuviera ojeriza a la institución o a su presidente -un Polo de los Polo de toda la vida confederada- sino porque me preocupaba su laxitud en un campo donde cualquier precaución es poca. En concreto, me intranquilizaba, y así lo expresé a continuación, que en lugar de mejorar la penosa situación en la que se encontraban las presas a su cargo, la CHJ se estuviera dedicando a satisfacer los anhelos paisajísticos de Jorge Rodríguez, Ribó y otros alcaldes. «Tiene a la mayoría de los embalses a la remanguillé», dije. Contundente afirmación que detallé sucintamente para que nadie pensara que me demasiaba. Lo que no me podía imaginar en aquel entonces es que los acontecimientos vendrían a darme dramáticamente la razón en cuestión de meses. Motivo por el cual no me he precipitado a mencionarlo. Y conste que si lo hago ahora no es jactancia sino porque un artículo del profesor y subdirector del IVIE Joaquín Maudos publicado el día 31 en Barcelona desvelaba estadísticamente el porqué de semejante abandono. La inversión en infraestructuras hidráulicas experimentó en España un crecimiento medio anual del 5,2% entre 2000 y 2008 y un descenso tan acentuado hasta 2020 que llegó a ser del -7,7%. Datos que me vienen al pelo para remachar dos clavos del ataúd hidráulico. Uno, que no sólo la gente de a pie se acuerda de Santa Bárbara cuando truena. Y dos, que si sólo se temió por la estabilidad de los tres pantanos que resultaron seriamente dañados por el temporal, Forata, Buseo y Cirat-Vallat -de los cuales sólo el primero pertenece a la CHJ; el segundo es el único que posee la Generalidad y el tercero está en manos de una mercantil-, no es porque las demás instalaciones de la red hidráulica valenciana estén en mejores condiciones de encajar esta clase de embestidas, que lo están muchas de ellas. Es porque no fueron sometidas a la misma prueba de resistencia que debieron soportar las antes mencionadas el pasado 29 de octubre. Pero están todas que 'la que no suma se n'ix', como no me cansaré de repetir. Sus carencias, necesidades y defectos de emplazamiento o de fabricación no han variado desde el 22-01-2024, fecha en que concluí el comentario aludiendo a las filtraciones de Tous. Pues bien, no me gustaría pecar de alarmista, pero los cuatro terremotos registrados el pasado día 26 se produjeron en tres puntos distintos del valle de Càrcer. A escasos metros por tanto de la mencionada presa. Una preocupación que la CHJ tuvo a bien ahorrarnos guardando un discreto o distraído silencio, que no sé qué es peor.