Directo Última hora del temporal de lluvias en la Comunitat Valenciana

Hoy toca escribir de Pedro Sánchez, de su amor por Begoña y de su dejación temporal de funciones, algo inimaginable en un presidente del Gobierno ... que ha puesto a la Nación en las manos de Dios, al menos hasta el lunes 29 de abril. A mí me interesa, más allá de la estupefacción política y los análisis mediáticos, el Pedro enamorado, el Ted de Corín Tellado en 'Un sólo hombre':

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«-Ted es así. Ya lo verás. Parece un tarzán. Siempre lleva medio pecho al descubierto, los pelos enmarañados, las manos callosas y en sus ojos color avellana hay un mundo de oculta ternura.

-Mucho le quieres.

Nuestro presidente, enamorado hasta las trancas, no quiere ni que la Justicia se arrime a su amada

-Sí. Era un gran muchacho y no creo que haya cambiado. Pese a su exterior rudo, resulta un hombre sensible, lleno de virtudes. Pero hay que ahondar para verlas, para palparlas. Nunca lo juzgues por su exterior. A las personas así hay que hurgarlas, analizarlas por dentro. Son personas con valores ocultos.»

Pedro Sánchez es nuestro Ted, el de los socialistas, el de Begoña, el de Diana (Morant), que el jueves por la noche, con la tinta de la carta todavía sin secar, pidió a todos los españoles y españolas «saborear» el mensaje de un presidente transmutado en un galán enamorado propio de un programa de la Gemio. Imagino al presidente sin funciones en este puente largo en una casita rural, en un pueblo de la Castilla leonesa, junto a Begoña al calor de la chimenea, viendo en bucle 'El diario de Noa' y cantando el 'Como yo te amo' -versión Raphael o Rocío Jurado- bajo la ducha como un español de orden enamorado.

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Porque todos somos Pedro, y como dice Zapatero: «Como el amor a tu pareja no hay nada, eso se antepone a tu ideología». De los 48,5 millones de habitantes que hay en España, la primera de todas para Pedro es Begoña, y lo que le pase a los demás, aunque seas presidente del Gobierno, le da igual. Porque Pedro es Piscis y los nacidos bajo este signo, según la astrología, buscan un amor de fábula y ensueño porque son generosos y altruistas, y aportan mucho cariño a su pareja. Y con la carta, escrita de su puño y letra en un arrebato del corazón, ha dejado a un país en un vivo sin vivir en mí, en un fin de semana huérfano de autoridad a la espera que Catalina de Siena, que se celebra el 29 de abril, obre el milagro para que Pedro se quede como Xavi en el Barça.

A la espera del color de la fumata, los mensajes de apoyo se suceden, la empatía con el amor y el tormento, de un mandatario hasta las trancas, que lo quiere dejar todo antes de que la Justicia, uno de los pilares del Estado, dictamine si tras la recomendación de Begoña hay algo que huela a influencia. A la política uno debe llegar ya vacunado, de lo que vale y de lo que no vale, y el verbo dimitir sólo se debería conjugar en presente si la opción se baraja. Las decisiones se toman porque van en el cargo. Y dejarlo todo por amor es lícito. Anunciarlo, hacer el ridículo.

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