Pestilencia creciente

Las cosas como son. A las claras. No tiene vuelta de hoja. Sánchez es corrupción. Estridente. Absoluta. La amnistía. El caso Koldo. Sin paliativos. Traicion. ... Basura. Autor del mayor enjuague fétido perpetrado en la democracia española. Que insulta la dignidad ciudadana. Pisoteándola. Comprar siete votos. A un delincuente fugado. Puigdemont. Otorgándole impunidad. Acatando sus condiciones. Puesto a sus pies. De modo sucio. Miserable. Cobarde. Para lograr ser investido presidente. Humillando con ello a la Nación. Incumpliendo su deber principal. Actuar en pro del bien común. Preservar la soberanía. La convivencia. Servir a la razón. A la verdad. A la equidad. Al interés general. Al imperio inquebrantable de la Ley. Garantizando la igualdad de todos. Ante ella. Siempre. Sin excepción. Es decir, lo contrario de cuanto hoy está sucediendo en España. Rehén de una trama delictiva. La que Sánchez se ha montado. Dirige. En su solo beneficio. Contra la Constitución y la patria. Injuriadas. Asediadas. Cautivas. Manoseadas al dictado de un individuo amoral. Mentiroso. Vil. Megalómano. Un tipo sin honra. Ni vergüenza. Capaz de cualquier cosa. Con tal de mantener un rato más su poder. Tras estafar al pueblo español. Primero. En las urnas. Prometiendo que nunca haría lo que luego ha tragado. Anteayer en el Congreso. Culminando la infamia. Aprobando una amnistía ilegal. Fraudulenta. Por una mayoría exigua. Pírrica. Ficticia. Que no representa a la opinión nacional. Opuesta a ella. Esa que Sánchez desprecia. Por completo. Como demostró también este miércoles. De nuevo. En la sesión de control. No dando explicaciones. Ineludibles. Precisas. Sobre el tinglado corrupto que cerca al gobierno y al PSOE. Señalándole a él de manera directa. Exhibiendo además un tono chulesco. Airado. Cínico. Para tratar de marear la realidad. Con embustes. Insultos. Falacias. Demagogia. Patrañas. Aunque a Sánchez ya -ni siquiera- tales monsergas le sirven. Los hechos mandan. Le sobrepasan. Tuercen sus planes. Se acaba de ver. Yéndosele al traste la estrategia diseñada. Así que este año no habrá Presupuestos. Tras la convocatoria electoral. Anticipada. Inesperada. Que se ha anunciado en Cataluña. Sánchez dice pues que renuncia a negociarlos. Forzado por la sorpresa. Cuando presumía de tenerlos en el bote. Pocos días antes. Presto al mercadeo. Con Esquerra, Junts, Bildu y PNV. Así pues más incertidumbre. España va a celebrar tres elecciones seguidas. Vascas, catalanas y europeas. Abril, mayo y junio. En medio de un clima político sórdido. Putrefacto. Insoportable. Pestilencia creciente. Nauseabunda. El hedor que genera la mafia del sanchismo.