Tope límite

Crece la amenaza. En estos días. Para España. Primero Puigdemont. Que es quien lleva la batuta. Luego Pere Aragonés. Ambos marcando fecha a Sánchez. Tope ... límite. El año entrante. Para concretar de verdad lo que a ellos les importa. Que es el referéndum separatista. Como y cuando. Clave angular. Condición exigida. De antemano. Esencial. Para hacer presidente a Sánchez. Si no roto el acuerdo. Las «consecuencias desagradables». Advertidas por el fugado. Este mismo mes. En sesión del Parlamento Europeo. Así que Sánchez tiene delante avisos de mar gruesa. En 2024. Por la presión del chantaje separatista. Por los recortes que le exige Bruselas. Duros. A fondo. También a tenor del calendario de elecciones previstas. Gallegas en Febrero. Muy pronto las vascas. Junio,europeas. No es descartable tampoco el adelanto electoral en Cataluña. Un contexto decisorio. Difícil para Sánchez. Sin posibilidad de recurrir a sus practicas constantes. La pirueta. El engaño. La estafa a los electores. Porque en Galicia no se come una rosca. En las europeas juega en su contra el tipo de circunscripción operante. Nacional. Unica. Ocasión pintiparada. Propicia. Para darle un voto de castigo. Masivo. A modo de censura ciudadana. Explícita. En las urnas. Y aún le quedará lo peor. El órdago. Las dobles parejas. Sin escape. Bildu y PNV. Esquerra y Junts. Caso letal. Damero maldito. Porque la continuidad del autócrata depende de seguir como hasta ahora. Teniendo el respaldo conjunto de todos esos escaños. A fin de mantener su mayoría. Como bloque. En el Congreso de los Diputados. Sin embargo Sánchez habrá de optar. Apoyando un gobierno autonómico. De unas siglas u otras. En el País Vasco y Cataluña. De PNV o Bildu. De Esquerra o Junts. Y ahí se le viene abajo el tinglado. Porque los preteridos le pasarán factura. Dejándole caer. Obligándole a convocar elecciones generales. Quizá para mediados de 2025. Más o menos.,Por eso suena pueril el balance anual que ha hecho este miércoles. Ajeno a la realidad del momento. Falso. Inquietante. Cínico. Como siempre. Sin mención a sus enjuagues traidores. Ni a la amnistía. Ni a la entrega de Pamplona a los amigos de ETA. O atreviéndose a afirmar que solo la oposición polariza. Crispa. Cuando la facción comunista del Gobierno ha vuelto a explayarse. En fechas recientes. Ministros en tono chusma. Soez. Pancartera. Zafia. Insultando el discurso navideño del Rey. Igual que separatistas y bilduetarras. El cancer de España. Por eso frente a Sánchez solo vale una respuesta. Firmeza. Valentía. Contundencia. Como VOX. A las claras. Sin titubeos. Componendas. Complejos. Ni monsergas.