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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y junto a él toda la izquierda deberían explicar los porqués de su sensibilidad hacia las celebraciones musulmanas y su frialdad respecto a las católicas, cuando los seguidores del mensaje de Jesucristo son desproporcionadamente mayoritarios en España sobre los ... de Mahoma. ¿Tan importante es el voto de la comunidad islamita o simplemente es consecuencia del odio por motivos difíciles de comprender? Si es por ello, deberían tener en cuenta a un personaje en 'El paraíso de las señoras' afirmando, «el odio es una pasión increíblemente poderosa. Corroe como el ácido» y, si la venganza es similar o consecuencia del odio, añade «es el veneno más peligroso, porque mata a quien la recibe pero aún más al que la ejerce».
Viene esto a cuento por la felicitación de Sánchez a la comunidad musulmana por el inicio del Ramadán cuando no se comporta igual con los católicos por la Semana Santa, a pesar que haya disfrutado de estas fechas que todos los españoles celebramos con motivo de la conmemoración de la Pasión y Muerte de Jesucristo y que, al parecer, deviene a ser un tártago para toda la izquierda, desde el PSOE y Unidas Podemos -éstos tienen la justificación de ser favorecidos por Irán en su financiación- a ERC o Compromís, como pudimos comprobar los valencianos cuando el exalcalde Joan Ribó 'plantó' a la Virgen de los Desamparados con la excusa de ser un Estado «aconfesional» y, sin embargo, organizó en la Plaza del Ayuntamiento una cena iftar de la Concordia con la que los musulmanes celebran el fin del ayuno del Ramadán.
Ni Sánchez, ni ningún otro dirigente de izquierdas ha emitido una sola línea, por poner un ejemplo, sobre la matanza de al menos 50 personas hace un año en Nigeria por un ataque de hombres armados en plena misa de Pentecostés en la iglesia de San Francisco Javier. Como tampoco elevan una voz por la lapidación de mujeres o ahorcamiento de homosexuales en aquellos países. Al igual que borran de la Memoria histórica la tragedia de sacerdotes, monjas y feligreses durante la II República.Como creo que procede, no resisto la tentación de reproducir el tuit atribuido a una persona en nombre de UP que la organización se ha apresurado a desmentir pero que me indujo a escribir este Gallinero: «Desde Unidas Podemos perdimos (imagino que quiso decir 'pedimos') perdón a todos los musulmanes y musulmanas que se hayan sentido ofendidos y ofendidas por las procesiones de Semana Santa y en espacios públicos de todos y todas».
Da la impresión de que la Iglesia produce en todos ellos una dispepsia incontrolable. Así es la vida.
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