Sánchez: «Disidentes, preparaos»

Lo preocupante de su «Esto no es un punto y seguido. Es un punto y aparte» es la interpretación, acertada según mi amigo Rogelio, de sus socios como, por poner dos ejemplos, Baldovi (Compromís) incitándole a combatir «la utilización del aparato judicial en algunos casos y el que haya medios de comunicación que publiquen noticias falsas y reciban dinero público», o Ione Belarra (Podemos) instándole a eliminar la mayoría parlamentaria marcada por la Ley para la renovación del Consejo General del Poder Judicial, así como cambiar el sistema de acceso a la carrera judicial, y la promoción de una 'Ley mordaza'.

Las intenciones son claras. Dominio de la Justicia y medios de comunicación y eliminación de la oposición. Sin embargo y a pesar de esta surrealista reflexión, siguen latentes asuntos como Koldo, amnistía, Begoña o Pegasus, que en pura lógica preocupan y desgastan, aunque ese desgaste no aparece en votos. Sánchez ha ido ampliando sus 90 diputados en 2015 a 122 en 2023.

Lo que más me ha enrabietado, incluso por encima de este paripé de cinco días: me ha vuelto a engañar. Durante los cuatro primeros mantuve que se quedaba. Las últimas treinta horas, gracias a la propaganda de sus acólitos y el anuncio 'orbi te urbi' de su visita a Felipe VI, me incline por la otra opción. Como sucedió con «no pactaré con Bildu» o «la amnistía es inconstitucional» me sucedió ahora. Como expresaba ayer el editorial de LAS PROVINCIAS, «...Pedro Sánchez ha vuelto a dejar constancia de que su afán por mantenerse en la Moncloa está por encima de cualquier otra consideración...».

Espero ahora que no haga buena aquella afirmación de un teniente inglés citado en 'Homo deus' (Yuval Noah Harari): «Si quieres ser alguien, no puedes mantener las manos limpias». Así es la vida.