Deriva consultiva

El CVC vive de dietas por asistencia a plenos y comisiones. Las montan a su manera, aunque no exista dependencia orgánica y menos responsabilidad vinculante. Se le debería dar autoridad o cerrar el negocio.

La ideología no está reñida con la inteligencia, pero ese tipo de instituciones se crearon para iluminar consensos, ser ecuánimes, ordenar conciencias, representar pluralidad y velar por nuestra realidad cultural. Así fue durante un tiempo, cuando el CVC no era orilla de políticos abandonados a su suerte y tuvo en sus filas a eruditos/as.

Hace unos días el organismo tuvo otra 'gran idea'. Así, de repente, se metió en asuntos como la guerra de Gaza. Ni que fueran la ONU, la Unesco, la FAO, la UE o hasta consultivo de la OTAN... Con lo fácil que era una mera declaración institucional en torno a las casi medio centenar de guerras que hay actualmente en el mundo, sobraba. Nadie está a favor de las guerras, pero no sé que pinta el CVC dando lecciones cuando tenemos a nuestro alrededor tantos temas de envergadura que no abordan ni se les consulta, como el firme apoyo en Eurovisión a Nebulossa, la pareja de Ondara que también pagamos a escote y no me representa.

Me gustaría saber a quién van a mandar su informe o a donar las dietas. A ver los gestos individuales.