Ausencia, silencio y cobardía

Las estrategias son necesarias. Y funcionan. Pero cuando se establecen para difuminar verdades, imponer confusión u ocultarse suelen terminar siendo demoledoras con quienes las practican. ... Por eso, que Mazón no afrontara desde el minuto uno, con toda claridad, todo lo que pasó desde el famoso almuerzo del 29-O a las primeras decisiones adoptadas el día después de la dana, ha supuesto que la batalla por el relato le fuera asfixiando hasta día de hoy. Por eso, los silencios del presidente de la CHJ, Miguel Polo, sobre qué ocurrió y cómo se actuó aquella tarde, qué atención dedicaron al barranco del Poyo y otras dudas, acabarán zarandeándole. Por eso, las ausencias de Sánchez en Valencia fueron insostenibles y las intentó paliar mal, cuando ya nadie olvida que evitó estar en los funerales. Y por eso, jugar con si llegan las ayudas y cómo, es un absurdo, porque la realidad se acabará constatando. Al final, el tajante filo de la verdad se acaba imponiendo a todo. La trasparencia, sin artificios, es el camino. El resto, cobardía. De un sorbo y sin azucarillo.