Solidaridad para vencer

Vivimos en un contexto, en el que, desde los distintos organismos, locales, autonómicos y nacionales, se reitera la importancia de la solidaridad con las personas en riesgo o situación de exclusión social. Los que nos dedicamos a trabajar con las personas más vulnerables sabemos de la importancia de la solidaridad, ya que, en Casa Caridad llevamos desde 1906 ofreciendo ayuda a las personas más desfavorecidas para proporcionarles un futuro más esperanzador, siempre gracias a la ayuda de los valencianos y las valencianas.

València es una de las ciudades más solidarias de España, y eso siempre lo hemos remarcado desde la Asociación Valenciana de Caridad, porque gracias a ellos hemos podido hacer frente a todas las circunstancias a las que nos hemos enfrentado. La demanda crece y el gasto de Casa Caridad, también. En lo que llevamos de año ya hemos repartido más de 16.000 carros de alimentos, contamos con una ocupación del 100% en los Centros de Acogida Temporal y el número de personas atendidas en los diferentes servicios de la Asociación ya supera, en casi un 20% las cifras que alcanzamos el año pasado.

El pasado mes de octubre dábamos el dato de que el número de atenciones a niños y niñas, durante este año, había aumentado considerablemente en comparación con el año anterior, en concreto un 72%. Este dato viene dado porque más familias «normalizadas» están sufriendo las circunstancias actuales y no pueden hacer frente a todos los gastos. En la mayoría de los casos tienen que elegir entre pagar el alquiler o comprar para que pueda comer toda la familia.

Nuestra ciudad recibe cada día a miles de visitantes, nacionales o extranjeros, que disfrutan de nuestro clima, de nuestra cordialidad, se asombran de la variedad de nuestras costumbres y admiran nuestros monumentos, obras de arquitectura, gastronomía y playas. Pero también, en las esquinas, en los parques, en los rincones, vemos a las personas sin techo, los que, sin darse cuenta, por diversas circunstancias, del día a la noche han pasado de una situación normalizada a estar sin techo. Nadie quiere estar en la calle. Si lo están es por necesidad o enfermedad. Personas de aquí y familias que han venido huyendo de situaciones dramáticas, buscando una mejor vida, una seguridad, un porvenir. Desgraciadamente, por las noticias que se publican, estas tragedias no van a ir a menos.

La València que queremos es esa que no gira la cara cuando ve a una persona necesitada. Que está orgullosa de avanzar en el estado de bienestar social en defensa de los más débiles. Que mantiene una organización como Casa Caridad para dar acogida a los más necesitados, una institución centenaria, privada y declarada de utilidad pública. En Casa Caridad mejoramos día a día y atendemos las necesidades individuales de cada una de las personas que llaman a nuestras puertas. Para hacer frente a la creciente demanda de atenciones, contamos con el servicio de comedor social para personas en situación de sin hogar, los Centros de Acogida Temporal, los tres Centros de Educación Infantil, el Programa Escuela Familia, el servicio de atención y distribución de alimentos y productos de higiene, y las diez viviendas supervisadas del Proyecto Fénix.

Por todo ello, reivindicamos una València solidaria. Casi el 70% del presupuesto de Casa Caridad, proviene de las ayudas de los particulares y de las empresas. Abrir las puertas de nuestras instalaciones en Pechina, Benicalap y Torrent cuesta cada día más de quince mil euros. Para continuar con nuestra labor, damos las gracias a los cuatro mil socios/as de nuestra institución y animamos a los que no lo sean, se sumen a la causa.

La València que queremos pasa por mantener el mismo propósito que ha tenido Casa Caridad desde su fundación: erradicar la pobreza.