Místico lector

Por título y original situación hay que citar 'Slaughterhouse', que visité hace tiempo y donde la primera condición que imponen es vivir relajado. Su peculiar distribución se debe a una antigua carnicería y el significado obedece a que sus socios: Jacobo -licenciado en Bellas Artes-, Ramón -ingeniero químico- y Jaime -filósofo- quisieron homenajear al escritor Kart Vonnegut por la novela 'Matadero 5'.

El homenaje se extendió a la carnicería, que fue muy popular en el barrio, de manera que se conservó el impoluto mostrador de mármol y colocaron tres láminas con las figuras del cordero, el cerdo y la ternera, junto con sus despieces de carne. En la carnicería/librería no faltaban los hierros ganchudos para colgar las piezas.

El recogimiento de los y las jóvenes asombraba, y la nota más actual destacaba con el trabajo manejando ordenadores personales.

En la misma acera de 'Slaughterhouse' también abrió 'Cosecha Roja' -sólo por las tardes-, especializada en novela negra. El local de tan fascinantes aventuras había sido una peluquería africana. Sabido es que en Ruzafa existe una importante población del continente sureño, que demandaba trenzas y rastas; gente que ha hecho florecer un comercio especializado en la zona, que abarca también numerosos lugares de gastronomía y repostería.

En la actualidad, ambos cafés-librería han tenido que remodelarse para sobrevivir en un barrio tan poblado y bullicioso como el de Ruzafa.