El agua y el fuego

La fiesta de San Juan es la adaptación cristiana de la fiesta pagana que antiguamente se dedicaba para festejar la llegada del solsticio de verano. Se celebra el 24 de junio coincidiendo con el nacimiento de San Juan Bautista. Si repasamos la Biblia, observaremos que es la fecha en la que Zacarías, padre de Juan Bautista, mandó encender una gran hoguera para anunciar el nacimiento de su hijo.

La celebración contempla, entre otros, dos rituales muy populares: saltar hogueras en la playa, a orillas del mar, como acto de purificación y petición de deseos, y el culto a las aguas como una de las manifestaciones más brillantes y comunes. Las aguas del mar de un lado, las aguas de las fuentes y de los ríos de otro, compartiendo la creencia de que en esta fecha tienen virtudes especiales que no disfrutan el resto del año.

Nuestras playas del Cabanyal y la Malvarrosa, por ejemplo, se verán rebosantes de valencianos que se reunirán para cenar, encender hogueras y bañarse en el mar, aunque algunos optarán por solo dejarse mojar los pies con las siete olas que marca la tradición. Otras fuentes apuntan a que deben ser nueve olas. Sean las que sean, la fiesta está servida. Esta velada también la aprovechan grupos de astrólogos, tarotistas y videntes para llevar a cabo sus mágicas experiencias, como sucedió hace muchísimos años en la emblemática ermita dels Peixets, en la que participaron videntes y los astrólogos valencianos Valls y Flames, éste último conocido fallero de nuestra ciudad.