Gastar lo que tengo en lo que me guste, en lo que me haga disfrutar, sin ningún sentimiento de culpa.

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Aguantar en mi zona de confort todo el tiempo que me dejen sin preocuparme si existen retos mayores a los que pueda enfrentarme y sin ... fustigarme por lo que pude haber hecho y no hice.

Decir no sin parar, sin contemplaciones, sin darle demasiadas vueltas a la cabeza, sin temor a la represalias.

Ser más egoísta, pensar en mí, cuidarme y ponerme en el primer lugar de vez en cuando

Decir basta sin parar, para impedir abusos, para dedicar más tiempo a lo que quiero, para no acumular tareas.

Utilizar las excusas que sean necesarias, sean reales o no, para no tener que hacer nada que no me apetezca o no me convenza y no estar lamentando después no haber desistido a tiempo.

Ser más egoísta, pensar en mí, cuidarme y ponerme en el primer lugar al menos de vez en cuando.

No tener problema en reconocer errores, complejos y traumas y airearlos si fuera preciso para intentar resolverlos o al menos para desahogarme convenientemente.

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Quejarme (mucho) si la ocasión lo requiere.

No resolver de cualquier forma lo que me preocupa, darme tiempo, huir de las prisas e intentar cerrar las heridas lo mejor posible para que no sangren de nuevo.

Fracasar y darme la opción de volver a intentarlo sin más justificación que me lo merezco.

Ver todas las películas y series que pueda, cuantas más mejor, para que me entretengan, me distraigan y me hagan estar tirado en el sofá.

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No intentar de nuevo lo de cocinar, aceptar ya que no es lo mío y que no va a salir nunca nada aprovechable de mis manos sobre las cazuelas. Asumir que no es mi fuerte y que pierdo el tiempo al buscar en mí alguna clase de cualidad culinaria.

Leer con calma, al ritmo que considere más óptimo, permitiéndome quedarme dormido si el día ha sido duro y abandonar la lectura si no está interesándome o no cumple las expectativas que puse sobre la obra.

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Seguir leyendo libros en formato físico.

Hacer deporte solo con el ánimo de mejorar mi salud, haciéndome cargo de que el físico es el que es y a estas alturas resultaría complicado cambiarlo o mostrar una imagen distinta de mí.

Perder el tiempo mirando el móvil, revisando aplicaciones absurdas que distraen mi cabeza e impiden ponerme en tesituras más relevantes.

Comer solo si así se tercia, sin miedo al que dirán. Ir al cine solo si no encuentro mejor compañía. Caminar solo si es lo que me apetece.

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Quedar con las personas que me aportan, que me hacen sentir mejor, que me provocan alegría y carcajadas.

Aprender a que me resbalen algunas opiniones, puntos de vista u observaciones.

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