Telecinquear

Es curioso cómo la competencia ha incorporado prácticas habituales del principal canal de Mediaset, a pesar de que este ande en caída libre de audiencia. Así por ejemplo 'Espejo público' ha decidido salvamizar su espacio dedicado al corazón, incorporando colaboradores habituales del programa de Jorge Javier y asumiendo tácticas como los cebos o las continuas salidas del plató. Por su parte, el magacín vespertino de Sonsoles Ónega ha puesto toda la carne en el asador -nunca mejor dicho- para plantar cara al debut en las tardes de Ana Rosa Quintana. Esta semana ha entrevistado al padre de una asesina condenada a 25 años de cárcel y a una expareja de la víctima de Daniel Sancho. ¿De verdad necesita Antena 3 parecerse a Telecinco? ¿No habrá sido precisamente ser diferente lo que la ha convertido en líder?

Por su parte TVE ha entrado en la batalla de la audiencia. Lógicamente es algo que le debe preocupar, pero al ser una emisora pública debería mirar otros parámetros. Así no parece de recibo que inicie sus principales apuestas a las once de la noche, como hacen las privadas, o que recorte y duplique capítulos de sus series ('4 estrellas' y 'La promesa') según le convenga. Más les vale a ambas aprender de los errores cometidos por Telecinco en los últimos años. Lo que están haciendo tal vez sea pan para hoy, hambre para mañana.