Borrar

Cuando llueve, aunque llueva poco, lo que me pide el cuerpo es hacer un cocido. Y tomarlo mientras dura el mal tiempo. Caminar bajo una ... lluvia sin excesos y hacerlo sin paraguas es otro pequeño placer propio del otoño. Ver la Albufera con lluvia es otro regalo que esta maravillosa Valencia ofrece en días extraños como los de hoy.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias Si quieres bailar, cántate