Fallas en mayo

Me encanta formular propuestas urbanas condenadas al más estrepitoso de los fracasos. No por absurdas, que tal vez lo sean, sino porque se salen del ... marco mental en el que se mueve la clase política. La valenciana y la española. Primer ejemplo: el barrio de la Fuensanta, uno de los más humildes de Valencia. Construido básicamente para realojar a los damnificados de la riada del 57. Casas baratas, bloques de pisos sin aparcamiento subterráneo ni ascensor, con calidades manifiestamente mejorables. Mi proyecto hubiera sido derribar edificio a edificio y reconstruir, garantizando la vivienda a los vecinos y ganando algo de volumetría para financiar la operación pública. Fincas con garaje y ascensor, eficientes energéticamente, dejando espacios libres para jardines y zonas deportivas. En vez de eso, lo que se hizo fue restaurar lo existente, es decir, consolidar unas construcciones desfasadas. Segundo ejemplo: la plaza del Ayuntamiento y el inmueble años sesenta que hace esquina con Barcas, el de aluminio y cristal conocido como edificio Eurotodo. Propuesta: expropiar y derribar. Problema: costaría un dinero que el Consistorio (en este caso con buen criterio) no se quiere gastar. Tercer ejemplo: el nuevo Mestalla. Lo mismo que en el caso anterior, expropiar y derribar. Fue un error, un monumental y carísimo error, no lo dejemos para siempre, no tiremos el viejo Mestalla, el estadio más antiguo de España. Lo que se va a hacer, a la vista está, marear unos cuantos años más para terminar perpetrando un campo 'low cost', probablemente sin cubierta y con acabados chapuceros. Cuarto ejemplo: las verbenas falleras. En lugar de que cada comisión monte la suya y la ciudad se convierta en un botellódromo gigante, con los consiguientes efectos en la limpieza, la seguridad y la imagen de Valencia, el Ayuntamiento debería organizar cuatro, cinco o seis grandes verbenas con suficientes servicios públicos, control policial, limpieza... La Marina, la ZAL del Puerto en La Punta, el entorno del Cementerio General o el tramo IX del jardín del Turia podrían ser algunas ubicaciones. Lo que se hace, o mejor dicho, lo que no se hace, se puede ver cada día de Fallas pero, sobre todo, a la mañana siguiente. Quinto y último ejemplo (por hoy, que tengo más): trasladar las Fallas a mayo, buscando un mes con menos lluvia y frío. ¡Anatema! ¡Las Fallas deben ir ligadas a San José, no se puede cambiar la fecha! Pero ¿que se celebra el 1 de mayo, ese día en que cuatro sindicalistas se manifiestan? San José artesano. Ahí lo dejo. Aunque sé que mi idea acabará en la papelera.