Bernabé y el Parque Central

Hay que recordar que Bernabé no es consejera de la sociedad Parque Central, por lo que es complicado saber cómo encaja esta decisión. Pero lo que está meridianamente claro es que el Gobierno de Pedro Sánchez va a llenar la agenda de la delegada y exconcejala de todo tipo de asuntos municipales, que para algo será su próxima candidata a la alcaldía en 2027.

La alcaldesa popular María José Catalá salió poco después advirtiendo de que todos los asuntos del planeamiento urbanístico son de competencia municipal. Tiene razón pero también es cierto que en la sociedad pública la mitad de los consejeros son del Gobierno y sus estatutos marcan que la presidencia tiene un voto de calidad en caso de empate, un «voto dirimente» como dice el documento. Es decir, que el Ejecutivo puede frenar cualquier cosa que quiera si no le parece bien. Es el caso de lo que opinan sobre las ideas de Catalá acerca de ese bulevar.

La división en el consejo no ha sucedido nunca, dado que en el Parque Central todos los asuntos han salido adelante con unanimidad, por consenso, aunque cada administración socia haya sido gestionada por un partido político. ¿Será el planeamiento del bulevar la primera votación en que ocurra lo contrario? Veremos.

Todavía falta mucho para eso, ni siquiera se ha firmado el contrato con la paisajista Kathryn Gustafson, que tendrá cinco meses a partir de ese momento para entregar un rediseño que suavice la idea de Compromís y PSPV, un corredor verde cuestionado por el mismo jurado que falló en el concurso de ideas. Todavía no entiendo la razón de que no se declarase entonces desierto.

Pero el asunto ha trascendido ya el plano urbanístico y se ha instalado en el político. De ahí que nos esperen muchas jornadas intensas alrededor de cómo será ese PAI, que es mucho más que un bulevar,

En realidad, son alrededor de 4.000 viviendas, que deben servir entre otros propósitos para dar respuesta a la falta atroz de oferta inmobiliaria en Valencia. Las obras en el canal de acceso siguen y cumplen los plazos. Es posible incluso que nos encontremos con la losa de hormigón del túnel acabada sin que haya acuerdo sobre el diseño del bulevar, con más o menos coches. Sería lamentable.

Pero el Parque Central es sólo el principio de lo que vendrá. Todavía es pronto para saber los otros temas en los que el Gobierno le dará protagonismo a Bernabé, pero parece claro que será en todos los que pueda discrepar de Catalá para lanzar un mensaje diferente. Tienen dos años por delante para sacar temas.

La dana ha situado a la delegada del Gobierno en una posición de liderazgo del que no ha disfrutado ningún candidato que estuviera en la oposición. Realmente no le hace falta ni entrar en el hemiciclo, mucho menos ser concejala. Así puede elegir los temás como si estuviera en un bufet.

Sería un error que el equipo de Catalá no se tomara en serio desde ya lo que ocurre. Seguro que lo han hecho, a la espera del movimiento de Compromís. Este mandato va a ser más que entretenido en los pasillos del Ayuntamiento.