La Rotativa se viste de torería

Ya el diario del pasado domingo adelantaba una amplia y documentada retrospectiva en la que firmas de prestigio y muy ligadas al mundo del toro, como las del cineasta y escritor, Agustín Díaz Yañes, el ganadero Juan Pedro Domecq o Víctor Zabala de la Serna, ahora empresario pero enraizado con dos dinastías tan taurinas como los Zabala, críticos, o los De la Serna, toreros, se referían a la figura de Enrique como una de las más relevantes que han existido a caballo de los dos siglos que le ha tocado vivir como figura del toreo.

Pero ese cuadernillo, excelentemente realizado por el crítico de este diario, Pepe Luis Benlloch, ha sido sólo un adelanto de lo mucho que a buen seguro todavía tendrá guardado para sorprender a los asistentes quien ha sido notario cercano de toda la longeva y prolija carrera de tan distinguido espada. Están siendo muchos los aficionados que han confirmado su asistencia, algunos tan fieles al homenajeado que pueden presumir de haberlo seguido desde aquella tarde en la que todavía un crío desplegó su primera lección en el coso valenciano, escenario donde tantas tardes, con su apolínea figura y su privilegiada inteligencia, lograba cautivar a tirios y troyanos. Tampoco faltarán gentes del mundo del toro que a buen seguro tienen cosas importantes que decir de quien ha paseado el nombre de Valencia con orgullo.