Prohibido fumar en la cama

Estos comentarios, publicados entre 2019 y 2021, han generado una reacción negativa en redes sociales y medios de comunicación. Tan intensa es la campaña que hasta peligra la candidatura de la actriz española a la estatuilla dorada. Ante la creciente presión pública, Karla ha pedido disculpas "a todas las personas que puedan haberse sentido ofendidas».

Los pronósticosno son buenospara Karla Sofía Gascón. La cultura de la cancelación sigue teniendo fuerza mediática. Hay una pujante censura política, de uno u otro signo, preocupada por la salud de nuestra alma y nuestra ideología. En tiempos del franquismo, cortaron referencias democráticas y besos apasionados en numerosas películas. El caso de 'Mogambo' (John Ford, 1953) fue cómicamente célebre: para camuflar una historia de adulterio, la censura alteró los diálogos y transformó el matrimonio de Grace Kelly con Donald Sinden en dos hermanos que compartían tienda de campaña por las noches.

Hay otro tipo de censura, más noble, interesada en nuestra esperanza de vida y en nuestra salud. El cine, la prensa y los programas de televisión evitan mostrar escenas explícitas de suicidio, debido a un fenómeno conocido como 'efecto Werther', término que hace referencia al riesgo de imitación o contagio cuando se representa el suicidio de manera explícita en los medios de comunicación.

El efecto Werther se basa en estudios que han demostrado que la cobertura mediática de suicidios, especialmente si se presenta de manera sensacionalista o detallada, puede llevar a un aumento en los casos de suicidio entre personas vulnerables. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido pautas para el tratamiento del suicidio en los medios, recomendando evitar las descripciones gráficas y los métodos empleados. Un caso notable fue el de la serie '13 Reasons Why' de Netflix, que inicialmente mostró una escena explícita de suicidio, pero luego la eliminó tras recibir críticas por su posible impacto negativo.

En Estados Unidos, J. R. Moser, miembro del Comité de Prevención del Fuego (Indiana), escribió en 1950 a su Asociación Nacional lamentando que en muchas películas los protagonistas fumasen en la cama. «Hemos aconsejado una y otra vez que no se fume en la cama, pero anoche vi una película en la que los actores, bajo la influencia del alcohol, lo hacen. Esto anima a fumar en la cama, ya que el público imita enseguida lo que ve en el cine». Las estadísticas son rotundas: fumar en la cama es una de las principales causas de incendios domésticos fatales, ya que una colilla mal apagada puede prender fuego con facilidad a la ropa de cama o al colchón.

Cito tres películas que muestran a personajes fumando en la cama: 'Instinto básico' (1992, Paul Verhoeven), con la famosa escena en la que Sharon Stone fuma en la cama después de un encuentro íntimo; 'Leaving Las Vegas' (1995, Mike Figgis): Nicholas Cage interpreta a un alcohólico autodestructivo que fuma en la cama en varias escenas; 'Sin City' (2005, Robert Rodríguez, Frank Miller, Tarantino), con varios actores encendiendo cigarrillos en la cama.