Secciones
Servicios
Destacamos
Recién abandonada, por fin, la fase del acné adolescente y del bozo sobre el labio superior, una de esas tardes morosas tu primera novia de ... inocentes besos quedaba contigo para tomar un café y te soltaba a bocajarro lo de «tenemos que hablar». Y entonces te desintegrabas, te hundías en la miseria, te sentías insecto de los que pisotean sin piedad. Aquella primera novia, de tu misma edad, te dejaba plantado porque descubría lo evidente; esto es, ella era mucho más madura que tú y necesitaba otra historia, sólo que en aquel trance lóbrego no lo entendías.
Yacías cariseco en el sofá familiar esperando que llamase con deseos de retomar la aventura. Y esperabas. Y seguías esperando. Un amigo mío pronunciaba una frase definitiva para esos casos. Llevaba un par de años esperando y cuando le dijimos que igual convenía pasar página, soltaba muy serio: «No no, ella está enamorada de mí sólo que todavía no se ha dado cuenta, pero ya veréis como se dará cuenta». Nunca apercibieron esa reclamación, claro, pero el tipo no desesperaba. Qué paciencia la suya. La nueva administración de Washington no nos llama. Han avisado a medio mundo para informar, para presentarse, para iniciar charla, yo qué sé. Pero de nosotros prescinden sin reparos. Somos el noviete que abandonaron como a un perrillo. Lejos de reírme ante esta situación, y aunque nuestro gobierno me provoca rechazo, no me gusta este desprecio tan estrepitoso. Contar con una vicepresidenta comunista no ayuda, desde luego, pero aún así somos un aliado y sobre nuestro suelo existen bases yanquis harto importantes. Sólo por eso merecemos un telefonazo. ¿Qué pueden trasladar esas bases a su socio preferente Marruecos? Que lo hagan. Además del gasto nunca se sabe qué sucederá en un país musulmán cuando fallece el sátrapa. Libia y Siria también parecían lugares seguros y fíjate luego...
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.