Secciones
Servicios
Destacamos
Posiblemente a ustedes la noticia les importe un bledo, pero a mí me ha causado un pavor mayúsculo, una especie de terror muy del tipo ... Lovecraf. Según una de esas encuestas que no van a ningún lado pero que, sin embargo, nos entretienen a los que militamos en el bando de las almas entre perdidas y cándidas, tres de cada diez españoles se han planteado en algún momento escribir una novela. Maldita sea, ¿más competencia? España destila bastantes anomalías, unas buenas y otras no tanto. Existe, pues, un fenómeno harto curioso: el de la gente que nunca ha leído ni un pimiento pero, en cambio, anhela convertirse en autor multiventas.
No creo que tres de cada diez españoles lean de una manera rutinaria un ratito al día. Con suerte, y siendo generosos, uno de cada diez, pero esta pulsión hacia la prosa y la gloria literaria yace muy arraigada y lo he podido comprobar. No falla, cada vez que un amigo se separa, pretende escribir una novela narrando su quebranto sentimental, su ruptura emocional, su electroshok de cruel realidad. Entienden que su separación es algo único, ignoran que responde a un idéntico patrón de lloros, trapos sucios que se arrojan, egoísmos larvados y otras trapisondas. Con mi primera novela conté con la veteranía y la inteligencia de una editora dotada de estupendo colmillo. Hablando con ella sobre esto, disparó una frase demoledora: «Todo el mundo cree, Ramón, que su pequeña y miserable vida sirve para una novela...». Aunque la sentencia resulte dura, rezuma verdad. Barrunta uno que todas estas personas que anhelan arrasar las listas de ventas con sus novelas deberían de, en primer lugar, leer mucho. Aprenderían y, de paso, fortalecerían la industria editorial. Y quizá, acumulando lecturas de los clásicos, les atraparían filamentos de pudor y renunciarían, por vergüenza torera, a pergeñar una novela.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.