Ustedes recordarán a un hombre que el 17 de diciembre de 2023 mató a golpes con una barra de hierro a tres hermanos que residían ... en Morata de Tajuña, provincia de Madrid. Era Dilawar H. C., natural de Pakistán y conocido como 'El Negro'. Regentaba un locutorio, y el móvil fue que dejó una buena suma de dinero a las dos hermanas, quienes a su vez estaban siendo estafadas por dos supuestos novios que vivían en Estados Unidos. Pero no acabó ahí todo. Una vez en la cárcel, el acusado mató a golpes a su compañero de celda, porque le molestaba lo sucio que era, según dijo. Esta semana se ha procedido a la reconstrucción del homicidio múltiple.
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Esta es una historia muy trágica, que deja muchos muertos porque uno o varios estafadores no tuvieron escrúpulos a la hora de sacar el dinero (unos 260.000 euros) a unas mujeres que fueron incapaces de reconocer un burdo engaño. Es una tragedia porque el asesino se arruinó para dejarles todo ese dinero. Ya tuviera la esperanza de recobrarlo o de cobrarlo con intereses, lo cierto es que tampoco Dilawar fue capaz de reconocer la mentira que las mujeres habían urdido para pedirle continuamente dinero (que eran unas empresarias que estaban pasando un mal momento y necesitaban un préstamo para salir adelante). Y también es del todo trágico que el hermano, que padecía un discapacidad severa, fuera una víctima más de la ira del homicida.
En las películas estos estafadores suelen aparecer como tipos simpáticos, gente con labia y mucho mundo que seducen a mujeres ricas que, una vez descubierto el engaño, pueden llorar su orgullo herido con los bienes abundantes que les quedan. Pero la realidad es más sórdida desde que existe internet, gracias al cual una horda de embaucadores lanza sus redes a cientos de miles de personas con variadas historias fraudulentas, tanto en ingenio como en su ambición. En la Facultad enseñamos que por improbable que sea el engaño, siempre habrá gente que por incultura, incapacidad o ingenuidad caerá en él. Los personajes de este crimen múltiple parecen dibujados por la mano de un diablo burlón: una mujeres mayores que prefieren creerse una mentira a ver de frente la realidad; un hermano discapacitado que no vio ni comprendió por qué iba a morir una fría mañana de diciembre; un inmigrante que después de trabajar duro para instalarse en España fue víctima a su vez de las mentiras de las ancianas. Que nadie hubiera podido detener todo este despropósito hasta la brutal culminación del triple homicidio parece sacado de una mala serie 'true crime'. El guion: el delirio de querer ser amadas sin que importe lo inverosímil de la propuesta. Y el final: la mano inexorable del destino en forma de una venganza feroz.
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