Guillén delega la Alcaldía al socialista Zapata y las áreas de Seguridad y Aseo Urbano a Gallud

La operación a la que fue sometido el pasado domingo el alcalde oriolano, Monserrate Guillén, en el Hospital General de Alicante ha supuesto la implantación de extensores en dos de las arterias del ecologista para 'desatascarlas' y solucionar la insuficiencia que sufrió el sábado por la noche, una dolencia a la que Manuel Gallud puso ayer nombre: infarto de miocardio. El primer edil permanece ingresado en la UCI del centro sanitario alicantino, desde la que firmó los dos decretos mediante los que deja en manos de su compañero de grupo las delegaciones de Aseo Urbano y Seguridad Ciudadana mientras que la Alcaldía la ocupará en su ausencia el socialista Antonio Zapata, que es el primer teniente de alcalde.

El portavoz del grupo municipal de Los Verdes compareció junto con su homóloga socialista, Carolina Gracia, antes de partir hacia Alicante, donde tenía intención tanto de ponerle a la firma los citados decretos de delegación como de hablar con el médico de la UCI para que le diera los pormenores del parte médico de Guillén, dado que durante el fin de semana le atendieron facultativos de Urgencias. No obstante Gallud ya puso duración aproximada a la baja de Guillén, «entre uno y dos meses», por lo que no solo se perderá las fiestas de la Reconquista, como se indicó el pasado domingo, sino que con toda probabilidad no vuelva a su cargo hasta mitad del mes de septiembre.

En todo caso se espera que si todo va bien Monserrate Guillén pueda abandonar el hospital en los próximos días, si bien permanecerá en la UCI al menos otras 48 horas a la espera de que los médicos comprueben la evolución de la intervención a la que fue sometido, de forma que pueda recuperarse en casa. Manuel Gallud afirmó que ayer estaba «estable, tranquilo y recuperándose dentro de la más absoluta normalidad». Monserrate Guillén, de 57 años de edad, sufre de hipertensión, aunque nunca había tenido un susto del calibre del que sufrió el pasado sábado. Por lo visto, el primer edil se sintió mal y fue trasladado en primera instancia al Hospital Quirón de Torrevieja, desde donde a primera hora de la tarde del domingo fue trasladado al Hospital General de Alicante, centro sanitario en el que permanecerá ingresado hasta que se le dé el alta, tal y como indicó ayer el portavoz de su grupo municipal.