El Ayuntamiento quiere que Adif le ceda la ronda alternativa que sortea la obra del AVE

La Concejalía de Urbanismo que dirige el socialista Antonio Zapata, también alcalde accidental, sigue trabajando en los pormenores del convenio suscrito entre el Ayuntamiento y el gestor de infraestructuras ferroviarias (Adif), que todavía está pendiente de firmarse.

En este sentido a principios de mes el departamento municipal cursó un escrito a Adif para que se haga eco de una petición de la administración oriolana, que el vial auxiliar que se construyó por la empresa encargada de los trabajos de soterramiento del tendido para aliviar el tránsito de vehículos en los accesos a la ciudad sea cedido «a los efectos de conformar un vial de la red de carreteras del municipio», según consta en la petición.

El documento recuerda que fue ejecutado con motivo de la construcción de la plataforma del AVE y como medida provisional para descongestionar el flujo del tráfico rodado, ubicado entre la rotonda de la CV-921 que da acceso al paso elevado que salta el tendido en dirección Arneva por las inmediaciones del IES Tháder, y la rotonda de la CV-925 que entronca con la CV-95 en dirección a Bigastro y Arneva.

La pretensión del bipartito es que ese vial no desaparezca tal como tiene previsto hacer el gestor ferroviario cuando concluyan las obras de soterramiento de la línea Alicante-Murcia a su paso por el casco urbano. Urbanismo sostiene que fue realizado mediante la expropiación definitiva de los terrenos sobre los que se ubica, con lo cual no se trata de una ocupación temporal con futura reversión del uso del suelo hacia los particulares, de ahí que en la petición se inste a que una vez acabada la plataforma del AVE este siga en funcionamiento y no se destruya. Cabe recordar que este vial alternativo tuvo un coste de ejecución de 1.096.000 euros aportados por la adjudicataria y tiene una longitud de más de un kilómetro.

La idea que baraja la Concejalía de Urbanismo es que sea la columna vertebral de una circunvalación sur que dé servicio al tráfico que en caso de no existir, tendría que volver a cruzar las calles del casco urbano para sortear Orihuela en dirección a otras localidades como Bigastro o la costa e incluso las pedanías.

La concejalía quiere asimismo que quede enlazado con el cuarto paso sobre las vías del AVE, previsto como salida natural de la ciudad al final de Duque de Tamames en dirección a Correntías y desde este conectar con los viales que van perpendiculares al tendido ferroviario hacia Almoradí. De igual modo en el extremo más cercano al IES Tháder se buscaría una conexión por detrás del centro educativo que cruce el proyectado PAU 12 que lleve de forma directa desde la calle Tormo de Haro hacia la ronda que circunda el Palacio del Agua y contar con salidas naturales hacia Beniel y Desamparados por el Molino de la Ciudad sin tener que colapsar las calles del centro de la ciudad.