Zapata no convocará el Pleno de agosto si no cambia el Reglamento que aprobó el PP

El último episodio en la pelea política en la que viven inmersos gobierno y oposición oriolanos desde hace ya cerca de tres años seguirá en marcha al menos hasta el Pleno ordinario correspondiente al mes de septiembre y que tendrá lugar el miércoles 24. El asunto no es otro que la celebración, o no, de la sesión correspondiente al mes de agosto y que por una norma no escrita se ha realizado desde hace años en los primeros días de septiembre. Mientras que PP y CLR sostienen que la Corporación debería haberse reunido el pasado día 10 -tal y como se acordó en Junta de Portavoces a final de julio-, el alcalde accidental, Antonio Zapata, reiteró ayer que no habrá pleno salvo que se modifique el Reglamento Orgánico que, a instancias de Asunción Mayoral, aprobó el Partido Popular una vez que el tripartito perdió la mayoría en el plenario.

El socialista calificó esta normativa de «ilegal» por el hecho de que en su artículo 18.2 se indica que no habrá sesión en agosto, si bien no se dice qué hay que hacer con la misma dado que la ley dice que en las poblaciones con más de 20.000 habitantes es obligatorio hacer doce plenos cada año. «No hay que forzar interpretaciones», aseguró Zapata con respecto a las últimas manifestaciones del liberal López-Bas, e instó a los grupos de la oposición a que den el visto bueno a la modificación reglamentaria que él planteará de cara al miércoles que viene. «Con la modificación del Reglamento Orgánico del Pleno se debe acordar cuándo se tiene que celebrar el correspondiente al mes de agosto», afirmó el socialista, quien salió al paso de las críticas recibidas desde las filas liberales en relación a un informe de Secretaría donde indica lo que dice la ley al respecto y precisó que ese documento «no dice que tenga que hacerse ese pleno en septiembre». De este modo el regidor comentó que la modificación del Reglamento deberá incluir que la sesión de agosto se celebre en el mes posterior o, en todo caso, cuando lo determine el propio Pleno «y si no se elimina ese artículo y directamente se celebra en agosto». Zapata explicó igualmente que en años anteriores los plenos celebrados en septiembre «no son ordinarios de agosto sino extraordinarios», lo que obligaría a llevar un orden del día preconfigurado, «por lo que hay que regularizar la situación sin interpretaciones», insistió.

Preguntado sobre si tiene intención o no de que este año haya doce plenos ordinarios, el edil afirmó que «si se modifica el Reglamento los habrá, y si no no», y recordó que ese texto está impugnado por el equipo de gobierno entre otras cosas por esta. Zapata dijo que el Reglamento Orgánico de Pleno es «ilegal» y que debe ser la Corporación la que decida qué hacer. Al mismo tiempo aprovechó para tirar otra pulla a los populares, a los que acusó una vez perdida la mayoría el gobierno municipal de cambiar las sesiones a los miércoles por la mañana, hurtando así la posibilidad de que muchos ciudadanos acudan a presenciarla como se decidió que se hiciera a principio de legislatura, cuando el gobierno de Monserrate Guillén, integrado entonces por PSOE, CLR-Claro y Los Verdes decidió que los plenos se hicieran en horario de tarde precisamente para posibilitar el acceso de los vecinos al devenir de estas reuniones mensuales de la Corporación.