Pilar M. Maciá
Domingo, 12 de octubre 2014, 02:47
En solo una semana el Partido Socialista Obrero Español habrá puesto cara a la persona que ocupará el número 1 de la lista con la que concurrirán a las próximas elecciones. Ese nombre se elegirá entre los tres que se presentan a las primarias que el partido ha fijado para el 19 de septiembre en las localidades de más de 20.000 habitantes. Una elección que no gusta a muchos de los que están llamados a votar en la sede de la calle Hospital por tratarse de un proceso limitado a la militancia en lugar de abrirse a los simpatizantes como sí que ocurrió a nivel autonómico. El Partido Socialista resolverá con las primarias el primer escollo antes de las elecciones, ya que una vez elegido candidato también será la asamblea la que diga si la lista de 25 nombres que presenta merece su confianza, y también arreglará la situación que se ha dado a nivel municipal desde que Antonia Moreno dejó la portavocía del grupo sin un líder claro y dos aspirantes a ocupar ese puesto -antes ya había dado paso en la secretaría general a Carlos Bernabé para ocuparse de otras labores internas del partido, en estos momentos como vicesecretaria general en la Vega Baja-. En el Ayuntamiento la bicefalia puso a Antonio Zapata en una parte, aunque tras deshojar la margarita el ahora alcalde accidental decidió no presentar candidatura ni avalar a ninguno de los que lo hacen -según su versión por no estar de acuerdo con que el proceso sea cerrado-. En el otro lado quedó Carolina Gracia que da un paso adelante y se postula para ponerse a los mandos de la nave.
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En medio de esa tensión se alzó la voz de Francisco Escudero Galante. Hijo del que fuera alcalde socialista Vicente Escudero decidió dar el paso y tras reunirse con un grupo de militantes, el 16 de julio pasado hizo pública su intención de presentarse. Periodista y escritor, guardián del legado de Miguel Hernández a las órdenes de su nuera durante años, pasó su ficha de militante de Elche a Orihuela para poder poner en marcha su proyecto Políticamente se define como defensor de la temporalidad en la política y afirma que cree en la política «en su sentido más digno, es decir, como una manera digna de canalizar la vocación de servicio a la gente y, por lo tanto, no creo que los profesionales que quieren perpetuarse en la política para tapar déficits personales».
La presentación de Escudero antes del verano inició los movimientos en el seno del partido, ya que quienes lo refundaron en el 2005 con Antonia Moreno a la cabeza nunca quisieron que una persona llegada 'de fuera', -aunque el aspirante es militante desde hace décadas, -y que no hubiera pasado por los trances que ellos han soportado desde hace ya casi una década les desplazara.
La intención era crear una candidatura de consenso y unidad con la que hacerse fuertes, y la candidata de Antonia Moreno para encabezar este proyecto era Ana Mas. Finalmente no hubo acuerdo con quienes querían hacerse con la primera posición y Carolina Gracia, harta al parecer de que se le dijera que no era su momento, decidió presentarse en la sede.
La actual portavoz socialista se estrenó en la política municipal como asesora en el grupo durante el pasado mandato, es concejal del gobierno desde el inicio de la presente legislatura. Aunque arrancó como responsable de las áreas de Juventud y Festividades, los avatares del Ayuntamiento y los pactos hechos trizas la hacen que termine con competencias de mucho más peso como las correspondientes al departamento de Hacienda. En su presentación como aspirante a candidata dijo que lo hace porque quiere ser alcaldesa de Orihuela «y no volver a las cavernas». Su perfil político, como ella misma indica, es ser una persona joven y de izquierdas; y se muestra convencida de que las ideas se han de construir con la sociedad, al tiempo que se define como poco propensa a los dogmas políticos y partidaria del libre pensamiento.
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Una semana después en el mismo escenario, la sede de la calle Hospital, Ana Mas confirmó que ella también optaría a las primarias. Su carta de presentación fue la gestión realizada como edil delegada de Cultura, al frente de este departamento. Mas es profesora de Filosofía y jefa del mismo departamento en el IES Tháder, donde trabaja desde hace 25 años en los que calcula «que he contribuido a la formación de unos 5.000 jóvenes del municipio». Se define como una persona «claramente de izquierdas y con objetivos políticos muy definidos a favor de la justicia social, el feminismo, el laicismo o el modelo republicano de Estado, pero también entiendo que en asuntos municipales no es difícil encontrar espacios de consenso que permitan avanzar, junto a otras sensibilidades, en la consecución del bien común».
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