Pilar M. Maciá
Lunes, 20 de octubre 2014, 01:08
Carolina Gracia auguró, ya por la mañana, que la de ayer iba a ser una jornada larga. Lo fue para ella, para su equipo y para los otros dos candidatos que se batían el cobre junto a la edil en la urna instalada en la sede de la calle Hospital, Ana Mas y Francisco Escudero. En juego estaba la primera plaza de la lista con la que el PSOE oriolano se presentará a las elecciones de mayo del año que viene, un lugar que pocos minutos después de las ocho y media de la tarde se supo que ocuparía Gracia. Aunque de forma matemática la victoria se conoció unos minutos antes de terminar con un ajustado recuento, fue cuando el presidente de la mesa, Daniel Nieves dijo que Paco Escudero había obtenido 30 votos, Ana Mas 71 y Carolina Gracia 84 cuando sonó un aplauso que hizo a la ganadora saltar de la mesa donde aguardaba, sentada, a que culminara el recuento. Lo hacía aferrada a la mano de una de sus colaboradoras y junto al que ha sido su mano derecha desde su aterrizaje en la política, Víctor Ruiz, que contabilizaba, atento, cada uno de los sufragios.
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Los besos y abrazos se sucedieron para escenificar la unión de nuevo de los socialistas oriolanos, de los que solo diez faltaron a la cita. El resultado salió de los 185 votos emitidos, todos válidos, de un censo de 195, lo que supone que el 94,87% acudió a la urna. Responsables comarcales del partido encabezados por su secretario general, Manuel Pineda, siguieron la jornada desde el inicio y velaron porque todo discurriera con total normalidad como así fue desde la apertura de la mesa electoral en la sede del PSOE.
Las primeras palabras de Carolina Gracia ya como candidata fueron de alegría y de enhorabuena a sus contrincantes «por ser capaces de quitar a la militancia el miedo que tenían de que esto no iba a unir el partido». La socialista valoró que si no se ha llegado a ningún acuerdo entre los tres aspirantes para conformar una candidatura unificada fue «porque ninguno queríamos renunciar a saber qué opinaba la militancia» e hizo hincapié en que «el enemigo no está dentro de esta sede, porque el enemigo es el PP».
A partir de hoy afirmó que se sentará «con todo el mundo» para empezar a rellenar la hoja en blanco con la que dijo que llega a lo más alto de la lista del PSOE, un papel que tendrán que rellenar los militantes y los ciudadanos y del que saldrá el programa electoral con el que se acudirá a la cita electoral. «Toca hacer un programa que ilusione», afirmó, y «lo más amplio posible para que quepa toda la ciudadanía».
Antes de dar a conocer ese programa a la candidata le queda otro trabajo, el de conformar la lista de 25 nombres con la que acudirá a las elecciones y que el partido deberá aprobar de nuevo en asamblea, una lista que afirmó que tendrá toda la libertad para conformar.
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