Bañuls anuncia su salida de la política tras gestionar un mandato «agotador»

La alcaldesa de Bigastro, Charo Bañuls, dará carpetazo a la política el próximo mes de mayo después de gestionar el Ayuntamiento durante «una legislatura agotadora». La regidora deja por el momento la primera línea de trabajo por «motivos personales» tras llevar a cabo una decisión que tenía tomada desde el pasado verano. La situación económica y la férrea lucha que mantienen los grupos políticos han acabado por desanimar a Bañuls para encabezar una reelección.

La regidora abandona la Alcaldía después de una decisión meditada durante los largos meses de gobierno en minoría donde apenas ha llegado a acuerdos con Upcl y PSOE. La popular aclaró que «esto es un descanso, no me voy porque me lo pidan o porque esté imputada». En cualquier caso ensalzó su trabajo al frente de la administración municipal tras asumir un Consistorio con una gran deuda a nivel económico, pero con la satisfacción de haber mantenido todos los servicios municipales operativos.

El actual gobierno local se mantendrá hasta las elecciones municipales y se prevé que el Comité Electoral del PP nombre al sucesor. Todo apunta a que Teresa María Belmonte Sánchez encabezará la lista electoral para que el PP mantenga la Alcaldía por segunda vez en su historia en el municipio. La alcaldesa no quiso dar nombres sobre su posible relevo, pero el de la futura candidata se filtró desde el partido.

En cuanto al trabajo desempeñado la alcaldesa detalló que «hemos puesto los cimientos para que el Ayuntamiento se abra al pueblo y no vuelva a ser el cortijo de los de siempre», y añadió que «hemos levantado las alfombras después de 28 años para que haya transparencia». Aunque lo que más le ha costado a la primer edil fue toparse con una oposición que le rechazó de forma sistemática el plan de pago a proveedores o la aprobación de proyectos para conseguir subvenciones de la Diputación Provincial. A pesar de ello, la bigastrense reveló que «todo el equipo de gobierno se ha mantenido unido y gracias a ello no he tirado antes la toalla».

El resumen de la gestión de los últimos años lo ciñó a un control de gasto por encima de grandes inversiones. Flanqueada por la concejal Sonia Belmonte y el edil Antonio González recordó que «no puedo negar que no estoy cansada por la situación económica porque la deuda es muy grande». En este sentido dijo que lo que se ha podido recortar por una parte en pagos a la Seguridad Social y Hacienda se ha incrementado por otro lugar al aumentar los intereses de los préstamos. Solo en el plan de pago a proveedores el Consistorio solicitó cinco millones de euros y todavía queda más de un año de pagos mensuales al Estado según lo acordado en los convenios.