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Joaquín Andreu Esteban
Martes, 12 de mayo 2015, 02:14
Los vecinos de Bigastro tendrán que encomendarse a la providencia para poder contar este verano con un lugar donde bañarse al aire libre de continuar la piscina y el complejo recreativo de La Pedrera en el estado en el que se encuentran a escasas semanas de comenzar la temporada de baño.
Mientras otras localidades se preparan estos días para tener a punto sus instalaciones y que entren en servicio a mediados del mes que viene las del municipio, ubicadas en el paraje de su zona de sierra, presentan un estado lamentable. El complejo es todo un cúmulo de deficiencias y la maleza surge entre las losas de un recinto donde el agua encharcada y verdosa de las piscinas, una destinada al baño de los mayores y otra de chapoteo, es foco de mosquitos.
No es la única de las deficiencias apreciables a simple vista ya que el sistema de depuración se encuentra roto y los restos de escombros y obras proliferan por las instalaciones, que además tiene parte del vallado en el suelo, enormes bolsas de basura con podas sin recoger en las inmediaciones o rótulos luminosos de lo que es la zona de acceso al restaurante rotos.
La alcaldesa, Charo Bañuls, es consciente del estado en el que se hallan y quiso precisar que la adjudicataria que se alzó con el concurso para su explotación tenía un año para poner a punto las instalaciones, aunque desde la oposición aseguraron que este plazo era tan solo de sesenta días. De igual modo la mandataria municipal dijo que a la empresa se le ha requerido un informe sobre las cuestiones que tiene pendiente de mejorar. Además asegura que «su intención es ponerlas en funcionamiento para la celebración de la romería de San Isidro», que se celebra en la localidad este fin de semana, en lo que parece una tarea más que ardua si no imposible en función del estado que presenta la que era una de las piscinas más concurridas de la comarca en época estival hasta hace escasos años.
La alcaldesa matizó que el año pasado ya funcionaron y que en el caso de que la empresa no cumpla y no logre ponerlas a punto «se tomarán las medidas oportunas», sin precisar si estas serán una revocación de la licencia u otras.
El estado que presenta el complejo ha ido a más deterioro desde que a finales del pasado verano las instalaciones cerraron tras una apertura del recinto más que polémica y que mantuvo enzarzados en discusiones y varios plenos consecutivos en junio del 2014 al equipo de gobierno popular y a las formaciones de la oposición, PSOE y Unión Popular. Estos reprocharon entonces que la alcaldesa había tenido tres años para poner en marcha todo el proceso de adjudicación y que lo hacía justo en el mes de comienzo de la temporada y con premura. Tras dos plenos más que polémicos porque desde las filas de la oposición reclamaron que faltaban informes que no llegaron a la Mesa de Contratación o que estos no tenían suficientes datos como para seguir adelante con el proceso, la mayoría simple del PP logró conceder la concesión por la abstención socialista y la piscina y el restaurante anexo pudieron abrir a finales de julio para volver a cerrar al mes y medio, y así siguen.
Otra de las cuestiones que fueron objeto de reproche fue la escasa capacidad que mostró la mercantil ganadora, Loespama del Mediterráneo, para acreditar que podía hacer frente a las inversiones a las que se comprometió con un proyecto de reformas de las instalaciones por un montante de 189.500 euros en diversas anualidades (con una inyección inicial de 47.000), ya que en los datos que aportó solo contaba con 3.500 euros en liquidez.
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