Borrar
Los técnicos colocan 'La tentación de Santo Tomás de Aquino' en su emplazamiento habitual del Museo de Arte Sacro.
Santo Tomás regresa a casa desde París

Santo Tomás regresa a casa desde París

El cuadro de Velázquez vuelve al Museo de Arte Sacro tras ser visto por medio millón de personas en la muestra de El Louvre

JUAN DIEGO ROCAMORA

Martes, 28 de julio 2015, 01:02

El arte no tiene fronteras y ser un referente en ese mundo es complicado, sin embargo y a la misma altura que Roma, Londres o París, Orihuela tiene una obra de incalculable valor, que cada vez que sale del Museo de Arte Sacro de la ciudad recibe la ovación y el aplauso de los más entendidos expertos. El cuadro 'La tentación de Santo Tomás de Aquino' de Diego Velázquez, obra del siglo XVII, partió a la ciudad parisina para una exposición monográfica sobre el autor. Una muestra que recibió la visita de alrededor de medio millón de personas y, en concreto, el cuadro cedido por parte de la Diócesis de Orihuela-Alicante sorprendió a los amantes del arte.

La obra del autor sevillano se cedió y a cambio el Museo de Arte Sacro acogió la obra 'San Felipe', del francés Philippe de la Champaigne. Un intercambio que requiere una serie de actuaciones por parte de los profesionales del museo oriolano, como así lo demuestran las varias horas que tardaron ayer para colocar el cuadro. Una actuación milimétrica que se llevó a cabo junto a detalles e inspecciones que parte de Pilar Vallalta, la restauradora del espacio cultural, se realizaron para comprobar que los informes tanto los de El Louvre como los que realizan en Orihuela son correctos y la obra no ha sufrido ninguna rotura ni desperfecto.

Antes de colocar el cuadro Vallalta examinó, por ejemplo, dos ampollas que tiene el óleo por si se hubiesen desprendido, así como otras anomalías. Por su parte el historiador y experto, Mariano Cecilia, explicó otros detalles de la obra, como que lleva una alarma propia, un sistema de temperatura y humedad de la sala para que el cuadro se conserve en buen estado o las diferentes pegatinas que rodean el soporte trasero de madera, que especifican los lugares en los que ha sido expuesto el como el Museo del Prado o la National Gallery de Londres.

Cecilia afirmó que hay salas de exposiciones como Viena, Valencia, Bilbao, entre otras, que se rechazan porque el cuadro puede sufrir algunas anomalías. El experto dijo que una de las cosas que más ha llamado la atención en París es el marco, datado en el siglo XVIII aunque de autoría anónima. Los expertos creen que podría ser de algunos autores locales de la época. Cecilia recordó que al cuadro, en concordancia con otros y aconsejados por un especialista, se le ha hecho un seguro de 60 millones de euros, aunque el valor de éste sea incalculable. Con la muestra de la obra velezqueña, primero en Madrid y después en el Grand Palais de París, el Museo de Arte Sacro estrecha lazos de colaboración con los Museos Nacionales de Francia y el Museo de El Louvre y se da a conocer a nivel internacional tanto el espacio cultural oriolano como la ciudad. De esta manera se reconoce la excelencia de este centro museístico al obtener todos los informes favorables del Ministerio de Cultura francés, del museo galo y del Colegio de Conservadores de Francia para albergar en sus salas esta obra tan relevante para el mundo del arte.

El Obispo, Jesús Murgui, aseguró ayer en el recibimiento al cuadro que en un principio «nos costó que subiera a Madrid y que saliera el cuadro de Orihuela». Murgui destacó la «grandísima» promoción que la obra ha hecho para la ciudad y la Diócesis. «Ha sido un gran embajador de la ciudad en el corazón cultural del mundo», aseveró el Obispo, y añadió que el cuadro ha sido la «auténtica figura y el centro de las miradas de los visitantes».

Por su parte, el alcalde, Emilio Bascuñana, valoró positivamente la salida del cuadro hacia París y recordó que solo alrededor de 28 ciudades en el mundo tienen un cuadro del pintor sevillano y entre ellas está Orihuela y con uno de un alto valor. El primer edil volvió a recordar, como ha venido haciendo desde que se postulara como alcalde a la ciudad, que Orihuela tiene un patrimonio cultural y artístico «envidiable» y que «tenemos que saber gestionarlo y enseñarlo». Como ejemplo de ello puso este intercambio entre el Museo de El Louvre y el de Arte Sacro y dijo que «nos tiene que llevar a otras fórmulas para gestionar un patrimonio en beneficio del municipio». Bascuñana apeló al trabajo conjunto y a «sumar voluntades» entre todos los agentes y profesionales para con «responsabilidad» y con la ayuda de la administración sacar el mayor beneficio a un patrimonio único en el mundo.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias Santo Tomás regresa a casa desde París