El alcalde defiende la memoria de la deuda hecha por personal municipal

El tripartito no se esconde para defender que la deuda real del Ayuntamiento de Callosa supera los 23 millones de euros. El alcalde, Francisco Maciá, ha convocado un Pleno extraordinario para el próximo viernes donde se discutirá la validez de la memoria de la deuda real que presentó el equipo de gobierno dos semanas después de entrar en el Consistorio. Este informe «lo hicieron los técnicos municipales con los que ha trabajado el PP los últimos doce años», aseveró el regidor.

El socialista se apoyó en los servicios de Intervención y Tesorería para aclarar que la cifra definitiva es de 23,2 millones sin contar con 1,9 millones que podrían sumarse si se pierden los juicios pendientes de sentencia en los que está envuelto el Consistorio.

Esta posición rebate la argumentación del PP de que había partidas duplicadas y que se había inflado la deuda con una memoria que «no se trata de un documento oficial». La oposición consideró que el informe lo había recopilado el concejal de Hacienda, si bien el regidor dijo que lo han hecho de manera íntegra los técnicos municipales sin contar con ayuda de ediles.

Para Maciá no hay margen de confusión porque cada bloque de compromisos por pagar tiene una naturaleza distinta. En este sentido, el documento se divide en deuda con los bancos, las que hay con proveedores, convenios para eliminar deudas, juicios con sentencias y juicios pendientes de sentencias. «No hay duplicidades porque lo que se contabiliza en un bloque no puede pasar a otro», comentó el socialista, que dijo que «tenemos una situación muy compleja que tenemos que afrontar».

La solución para encararla el próximo año, cuando llegarán las cuotas del préstamo de 8 millones de euros para el pago de facturas, es una refinanciación. «Vamos a tener que refinanciar lo que ya estaba refinanciado», explicó el primer edil, que dijo que el Ministerio de Hacienda ya trabaja en un plan para los ayuntamientos que pasan por apuros económicos más graves.

El primer paso que debe dar el Consistorio es mejorar las condiciones de manera directa con los bancos ya que en su defecto, el Gobierno central es el encargado de incluir al municipio en la lista de los consistorioc que no podrán cumplir con sus obligaciones de pago en 2016. Solo a los bancos se deben catorce millones de euros, que es la cantidad que el PP considera que hay de deuda.

Otro problema es el de las facturas que no se han reconocido este año y que no han pasado el visto bueno del departamento de Intervención o de los cargos políticos. Al final de año Maciá adelantó que habría que realizar un reconocimiento extrajudicial de créditos.

Por el momento el Consistorio ha comenzado a reducir gastos al querer eliminar el alquiler de la Oficina de Turismo y va a cerrar la Casa de la Juventud mientras no tenga que acoger actividades.