«Los oriolanos deben cambiar de actitud si quieren que esta ciudad saque los pies del plato»

Con tres móviles encima de la mesa que asegura que usa «según el día», Emilio Bascuñana Galiano hace balance de su primer medio año al frente de la Alcaldía de Orihuela. Mientras se le acusa de lento a la hora de gestionar, él sostiene que la situación en la que su equipo se encontró el Ayuntamiento necesita de tiempo para ordenar lo de dentro para poder empezar a ocuparse de lo de fuera, y asegura que hay pufos que vienen de años atrás al tiempo que reclama un cambio de actitud de los oriolanos para poder sacar al municipio adelante.

- Un gobierno en minoría siempre es difícil, ¿cómo lo llevan?

- Lo llevamos bien, con la misma ilusión que el día en que empezamos. A lo mejor más, porque es verdad que hay mucho trabajo, hay un desgaste, hay cansancio físico y mental, pero con ilusión porque hay mucho por hacer y estamos en el sitio adecuado para hacerlo. Las circunstancias son las que son, pero estamos donde teníamos que estar para hacer lo que queremos. Lo que echo en falta es que el resto de políticos y todos en general, trabajadores, técnicos y ciudadanía colabore y trabaje con responsabilidad para sacar Orihuela adelante. Tenemos que darle a la ciudad el vuelco que necesita y nosotros solos no podemos, necesitamos el compromiso de todos.

- ¿ Qué es lo más urgente que tenía que abordarse en el Ayuntamiento?

- Pues es a lo que nos hemos dedicado estos meses, que es a intentar poner orden y sacar las cosas que hay atascadas. Luego pues empezar a trabajar por el futuro. Actualmente hay muchas cosas que arreglar de forma imperiosa, ahora mismo se me ocurre el pago a proveedores. Hay un atasco impresionantes, se deben unos ocho millones de euros y tenemos dinero, pero no se paga por unas cuestiones de Intervención que no salen adelante.

- ¿Se incumple el plan de pago a proveedores?

- Hay un informe de Intervención que se adelantó a la hora de emitirse y el interventor tendrá que explicar por qué no se paga, porque hay dinero, hay voluntad de los políticos por pagar, incluso instrucciones de que se pague, entonces si se dan todos los factores y no se paga habrá que explicar por qué.

- Aparte del tema económico, que siempre ha sido caballo de batalla de este Ayuntamiento, dice que tienen que ordenar el funcionamiento interno.

- Nos hemos encontrado con muchísimos problemas de gestión y nos seguimos encontrando. Aquí mueves un papel y te sale un ratón no, una rata pero de las grandes. A ninguno nos gusta la limpieza en Orihuela, queremos mejorarla, pero nos encontramos con un par de contenciosos que impiden plantear siquiera si se quiere externalizar el servicio o seguir con la gestión directa. No está siquiera hecha la liquidación de la UTE del servicio que se rescató, cuando había seis meses para hacerla.

- Hablamos de contenciosos que vienen de dos legislaturas anteriores, cuando no se produjo la adjudicación a Urbaser y cuando se rescató el servicio y se municipalizó.

- Si. Hablamos de que el servicio de limpieza y recogida de basura tiene que hacerse, hay que tener en cuenta la reparación, el mantenimiento de los vehículos, la compra y amortización, gastos del personal que tiene que gestionar... Si es mejor externalizar o no, pues habrá que hacer números. Si ahora los hacemos y después nos toca pagar más de 20 millones que nos reclaman, más de 7 Urbaser y más de 12 la UTE no se cómo van a salir las cuentas ni cómo se va a pagar.

- Con un presupuesto además que en ese servicio, como en otros, lleva siendo el mismo desde hace cuatro años.

- Con un presupuesto prorrogado. Ahora estamos inmersos en la elaboración del presupuesto, está a punto de terminar para poder empezar los trámites. Ahí hemos estado, como quedamos en el acuerdo para garantizar la gobernabilidad del Ayuntamiento, colaborando con Ciudadanos, con las reuniones oportunas, y el presupuesto tiene una parte de continuidad y una parte, pequeña por desgracia, que es la más operativa. Ahí estamos trabajando para ver cómo darle forma. Incluso en el presupuesto nos estamos encontrando con muchos problemas, está el dinero de las parcelas que se vendieron para generar inversión y resulta que ahora el dinero está en una cuenta de la que no se puede sacar porque genera un desequilibrio presupuestario. Pues entonces, ¿para qué se vendieron las parcelas?

- ¿No se puede entonces contar con el dinero de las parcelas?

- Espero que se pueda contar. Estamos preparando todo para que se pueda, pero no a través del presupuesto directamente, habrá que hacerlo mediante remanentes y hacer una serie de equilibrios. Nos dicen que contratamos una asesoría externa, pero si el área de Intervención no puede siquiera sacar adelante las facturas, si el equipo de gobierno anterior la desmanteló a última hora... Aquí hay una trampa detrás de otra. Hemos intentado solucionar temas como el de Dinoco, consideramos que la solución menos mala sería adjudicar el servicio a una sociedad municipal, pero cuando nos vamos a ver su situación resulta que no se han presentado cuentas, que no se sabe si están paralizadas, nos han retirado el CIF de Surpal... Cambiamos en Pleno el objeto social de Uryula Histórica y cuando llegamos a la constitución del consejo de administración viene la vocal del PSOE y dice que está en causa de disolución y hay que pararlo porque es responsabilidad de los consejeros. No se puede mover un papel, y todo esto necesita que de verdad la gente quiera apoyar y solucionar las cuestiones. Si se busca una solución entre todos, al final se encuentra.

- ¿Y qué se están encontrando?

- Nos estamos encontrando con distintas formas de hacer política, con la forma más rancia de hacer política, se espera, se es oportunista y se busca la oportunidad para dañar no a un equipo o a una persona, sino para dañar a Orihuela. Por seguir con el ejemplo, espero que esa actuación del PSOE con Uryula Histórica no paralice el procedimiento, pero de momento lo ha frenado. Se podría haber resuelto hace dos semanas y no se ha resuelto. Ellos frenan una solución al problema de Dinoco, así que pido un ejercicio de responsabilidad y en la apuesta por solucionar los problemas, con críticas constructivas, irónicas, las que quieran, pero apostando por avanzar y aportando. Los medios de comunicación también juegan un papel importante y todos tenemos que hacer equipo.

- Precisamente la oposición le acusa de ser un alcalde lento a la hora de tomar decisiones.

- Creo que soy una persona prudente, y me hacen dedicar mucho más tiempo a cosas que no debería dedicarles, y ellos también dedican mucho tiempo a cosas que no debían dedicarlo. Me viene a la cabeza que pida Víctor Ruiz, con esa vehemencia con que lo pide todo, que se constituya una comisión informativa de la ORA, cuando el que más tiene que informar es él, que gestionó y dejó que esa empresa no pagara. Jugamos a las viejas formas de hacer política rancias, trasnochadas, anacrónicas y poniendo palos en las ruedas de forma absurda e ilógica. Si quieren aportar que vengan, tengo las puertas abiertas desde el primer día para trabajar de verdad, para todos los partidos menos para Foro Demócrata por las circunstancias que todos conocemos. Insisto que me gustaría que Pepa Ferrando saliera bien parada de sus problemas judiciales, pero mientras esté en esa situación no contaré con ella. Estamos abriendo las puertas a la participación sin límite de los partidos políticos.

- Pero luego por ejemplo para el presupuesto no se cuenta con ellos, de momento, ha dicho que han hablado con Ciudadanos.

- De momento damos esa participación a Ciudadanos, que es con quien tenemos el acuerdo de colaboración, y al resto se dará la oportunidad de participar cuando esté elaborada nuestra parte. Yo no voy a abrirme a la participación de un partido de la oposición, que por otra parte ha dicho que no quería colaborar con el gobierno, hasta que no haya hablado con mi equipo. Tenemos que elaborar nuestra propuesta, cuando la tengamos, pulsando a vecinos y asociaciones y al partido que nos está apoyando, y cuando eso esté hecho se hará partícipe a la oposición, y si puede aportar algo que aporte.

- Las malas relaciones entre Ayuntamiento y la Generalitat en los últimos años han lastrado el desarrollo de Orihuela, parece que ahora mismo no son mejores...

- Pues yo no lo diría así. Creo que lo que ha lastrado a Orihuela durante estos años y es posible que en el futuro es la actitud de los oriolanos. Que me disculpen los que puedan sentirse molestos porque generalizar siempre lleva a ser injusto, pero creo que lo que lastra a Orihuela desde las últimas décadas es la actitud de los oriolanos, e insisto en que me gustaría poder aportar algo para que la actitud de los oriolanos cambiara. Es la necesidad más urgente e importante que tiene ahora mismo Orihuela. Estamos esperando a que vengan a solucionarnos los problemas alguien de la Generalitat, del Gobierno Central, de Europa... Que venga un mesías a arreglar los problemas, y los problemas se solucionan trabajando y poniendo en valor Orihuela, criticar menos y aportar más es lo que hay que hacer. Los ciudadanos, los técnicos, los políticos y los medios. Con todo lo que tenemos tenemos que estar orgullosos y saber trabajar para mejorarlo sin tanto criticar ni sacar faltas. Es más importante hablar del pedazo de monumento que es Santo Domingo que resaltar si una piedra se ha movido o se ha caído, sin quitarle importancia a esto último. En la costa tenemos muchas cosas que disfrutar y que transmitir y compartir con los que nos visiten. Es más importante transmitir sus bonanzas que sacar si hay un parking de hace cincuenta años con un techo de amianto. Si se quiere dar a conocer Orihuela no hay que salir cada dos por tres a decir que una bombilla no se ha cambiado, porque ya se cambiará. Hay que trabajar con seriedad y con ganas de sacar esto adelante y mejorar. Si Orihuela hubiera tenido esa actitud la obra del AVE habría sido otra, si hubiera habido la actitud de emergencia de cuando se hizo la manifestación y la huelga general para exigir el hospital hoy habría una obra del AVE concluida y nos habrían pagado por ella. Nos habrían compensado como a Torrevieja por la desalinizadora.

- ¿Cree que es posible ese cambio de actitud?

- Si trabajamos todos al unísono por eso si. En la oposición, pese a haber gente muy joven en edad, veo en su actitud más de lo mismo.

- Al final no me ha dicho cómo es la relación con la Generalitat.

- Con algunos está bien, nos tratan como corresponde, hace poco estuvo aquí el secretario autonómico de Turismo, siempre disponible y con aportaciones, como corresponde tratar a una de las ciudades más importantes de la Comunitat. Hay otras consellerias como Sanidad o Agricultura con las que no hay relación. No ha venido la consellera de Agricultura a ver la Vega Baja, a conocer la huerta de Europa, a nuestros agricultores, nuestra escuela agrícola... Somos la cuarta ciudad de Alicante y la sexta de la Comunitat.

- Y aparte del trato, ¿cuándo van a dar lo que deben a Orihuela?

- Esa es otra historia, que obras son amores y no buenas razones. ¿Cuándo? El tema del centro de salud es indignante, es indignante que no se adjudicara en julio. Han esperado seis meses, no sé si a que llegaran las elecciones o a qué. Y sin contestar al alcalde, que es el que está molesto, el representante de todos los oriolanos, y al representante de todos los oriolanos la conselleria de Sanidad lo ha ignorado, y la consellera vino a presentar la adjudicación en un mitin político. Y eso es a lo que hacía referencia con la actitud, los mismos oriolanos, por muy socialistas que sean le tenían que haber dicho que no ignore a nuestro alcalde, porque el alcalde de Orihuela no es el alcalde de los afiliados y simpatizantes del PP, es de los socialistas, de los populares y de todos los demás, y mientras no cambiemos esa actitud no haremos nada. Echo en falta que todos estén con la ciudad, que todos los oriolanos la sepamos valorar, no hay que estar con el alcalde o con otro, hay que estar con la ciudad, y si viene un conseller no se debe evitar que vea al alcalde, ¿a qué jugamos? Así no podemos salir para adelante. Eso ha ocurrido y sigue ocurriendo. Insisto en que mi mayor preocupación es lograr que cambie la actitud de los oriolanos. Y para eso hace falta gente ilusionada, que se comprometa, y que cuando se caiga tenga capacidad de levantarse y seguir con la misma energía. Tenemos que conseguirlo, y a la gente fracasada, a la gente que se rinde, debe cambiar de mentalidad y ser más feliz y más positivo. No quiero que se aparten, los quiero a todos, pero cambiando de actitud.