Regalos para curar a pequeños pacientes

La mayor felicidad que puede tener un niño es que se hagan realidad todos sus deseos y la mejor de las curas para aquellos que pasan durante estos días sus vacaciones ingresados en un centro sanitario es que les sorprenda la visita de sus personajes favoritos. Si estos son los Reyes Magos la satisfacción y las caras de ilusión suponen la mejor de las medicinas porque durante un momento se olvidan de que tienen que permanecer por diversos motidos encamados.

Ayer no iba a ser menos ya que como todos los años los Magos de Oriente hicieron su llegada anticipada al Hospital Comarcal ubicado en la pedanía de San Bartolomé cargados de presentes para los pequeños que repartieron por las diversas plantas del centro. Llegaron algo más tarde de lo previsto pero llegaron y lo hicieron rodeados de toda su comitiva de pajes con toda clase de juguetes. También estuvo la concejal de Festividades de Orihuela, Mariola Rocamora, en una cita a la que Melchor, Gaspar y Baltasar acuden fieles desde que el centro abrió sus puertas hace un cuarto de siglo.

A las puertas fueron recibidos por los responsables del mismo: la directora de Atención Primaria, Rosario Sansano, y Pilar Santos, responsable de Medicina Especializada, junto a Francisco Jesús García, director de Enfermería. Ellos y Bernardina Ortuño, la supervisora de Pediatría, fueron los que guiaron a los monarcas de la ilusión por los pasillos del hospital. Sus vestimentas y todo el séquito despertaron los anhelos de los niños al tiempo que arrancaron sonrisas cómplices de sus padres o abuelos. En total más de sesenta pequeños recibieron algunos de los detalles que los Reyes Magos habían apartado de sus alforjas para que fueran los primeros en disfrutar de los juguetes, juegos educativos y muñecos que harán sin duda más llevadera su estancia anclados a goteros, vías o postrados en las camas.

Sus Majestades de Oriente desplegaron un derroche de bondad en un recorrido que empezó por la consulta de Pediatría y se extendió a otros departamentos como los de Neonatos, Maternidad o Ginecología. Tampoco se quedaron sin regalos las madres ni los pacientes de la Unidad de Psiquiatría Infantil donde algunos de los ingresados no estaban al encontrarse de permiso. Todos disfrutaron de la charla con los tres reyes mágicos y los padres quedaron encantados de poder inmortalizar con sus móviles las caras de asombro de sus retoños al ver entrar por la puerta a gente que no era enfermero o médico para administrarles su tratamiento. Asimismo alguna niña que se los topó por los pasillos se llevó de forma improvisada un recuerdo y no eran pocos los que se quedaron boquiabiertos al verlos salir de los ascensores.

La visita supone «sacarlos de la monotonía del hospital por un momento y que disfruten también pese a estar enfermos porque el hecho de que tengan que estar aquí no debe suponerles que se queden sin ver a los Reyes Magos», dijo la doctora Pilar Santos. Todo el personal del centro es consciente de que la permanencia hospitalaria en unas fechas de vacaciones «también les desconcierta y todo lo que sea arrancarle una sonrisa sirve como terapia».

Hoy será el turno para el resto de pequeños de la comarca. Melchor y sus compañeros Gaspar y Baltasar se dejarán ver por Orihuela desde primeras horas de la mañana. A las 10.30 horas serán recibidos por el alcalde, Emilio Bascuñana, en el Ayuntamiento desde donde partirán hacia el Teatro Circo para escuchar las últimas peticiones de los niños. Luego cargarán más juguetes para la Cabalgata que saldrá a las seis de la tarde desde Las Espeñetas para recorrer las calles de la ciudad.