La comida del futuro se cuece en la Epso

Ocho nuevos productos alimentarios se presentaron ayer en La Lonja durante la celebración del tercer concurso 'New Food' organizado por la Escuela Politécnica Superior (Epso) de la Universidad Miguel Hernández. Es la primera vez que este evento se saca del campus de Desamparados y la intención, tanto de la dirección de la escuela como del Ayuntamiento es hacer partícipes de él en años sucesivos a los oriolanos en general y a los responsables de empresas agroalimentarias de la zona en particular, para que conozcan el trabajo que se desarrolla en el centro universitario y que puede servirles para enriquecer con estos graduados sus departamentos de investigación y desarrollo.

La escuela oriolana es el único centro de España que realiza esta actividad a la que los alumnos llegan en su último año de carrera y en la que aplican todo lo estudiado durante su formación en Ciencia y Tecnología de los Alimentos. Así lo indica el profesor José Ángel Pérez, encargado de la asignatura Desarrollo e Innovación de Productos Agroalimentarios, que junto con Marketing Agroalimentario, a cargo de Margarita Brugarolas, organizan esta actividad. Los estudiantes realizan todo el proceso, desde idear el producto hasta su elaboración y comercialización, por lo que el jurado pudo ver y probar ayer los distintos alimentos ya preparados, envasados e incluso ver el anuncio publicitario que han preparado.

La jornada de ayer se inició a primera hora de la mañana, con los ocho expositores de los productos instalados en el zaguán de La Lonja, un edificio que durante años recibió para su posterior venta las producciones de los campos de la zona. El jurado, compuesto entre otros por el vicerrector de Investigación e Innovación, Manuel Jordán, la directora gerente del Parque Científico de la UMH, Tonia Salinas o la concejal de Educación, Begoña Cuartero, probó cada uno de ellos antes de que ya en el auditorio se realizaran las presentaciones de la parte económica y de marketing agroalimentario de cada uno.

Aunque fue muy difícil calificarlos, el jurado tuvo que dar los tres premios que concede la Universidad Miguel Hernández por el desarrollo, tecnología, e innovación de los alimentos, que fueron para el aperitivo York'ess el primero, el café Cofee & Mint el segundo y las galletas de chía y quinoa Artequinas el tercero. El galardón de la Fundación Quorum al proyecto con mayor salida potencial en el mercado fue para el licor de chufa Tigernut y en el galardón concedido por la Cátedra Cajamar hubo tanto debate que finalmente fue compartido entre la salsa de calabaza Calioli y el helado Aven-Ice. El jurado tuvo en cuenta tanto lo que representa el producto en cuanto a desarrollo e innovación como qué aportaba cada uno a las '5 eses' necesarias para tener éxito en el mercado: sano, seguro, sabroso, sostenible y socialmente aceptable, así como la presentación y el etiquetado. El profesor Pérez resaltó que lo más importante a la hora de crear nuevos alimentos es cubrir las necesidades del consumidor, y destacó que más que un proyecto, para los alumnos este concurso es ya una salida al mercado que se quiere abrir a la ciudad aún más de cara a próximas ediciones.